Cecilia Silveira/SIPSE
MÉRIDA, Yuc.- La organización Veganos de Mérida Yucatán (Vegan) indicó que cada vez más personas adoptan esta cultura, “algunos empiezan como parte de una limpieza física y espiritual, otros por su amor a los animales y muchos más por salud”.

El veganismo es la práctica que consiste en abstenerse del consumo o uso de productos de origen animal, explicó.

Felipe Veliz Medina, fundador de la organización, señaló que desde hace tres años se dedica a buscar veganos, “tengo una estadística con respecto a los que conozco y los que también conozco indirectamente, con nombres y sus historias”.

Mencionó que sólo en Vegan Mérida hay 53 personas registradas, más 70 que también lo son aunque no pertenecen al grupo.

En el Sureste hay más de 400, la mayoría en Campeche, Yucatán y Quintana Roo, los demás son como mil 500 vegetarianos.
Liliana Fernández Aguilar, bióloga y especialista en etología canina e integrante de Vegan, explicó que las personas en el Estado se vuelven veganas por diversos motivos, pero los dos principales son las preocupaciones de salud y una mayor conciencia sobre el trato animal.

“Puede ser gente con tendencia a enfermedades cardiovasculares o que quiera bajar su colesterol, pero también que hayan visto algo de la producción industrial de los animales de granja y queden impresionados, por lo que deciden incursionar en el veganismo”, explicó.

El tercer factor, que es más común, mencionó, son las razones medioambientales, como el calentamiento global o la deforestación.

Hace algunos años el veganismo estaba ampliamente asociado al activismo por los derechos de los animales, una buena salud o motivos religiosos, pero ahora, cada vez más gente coquetea con una dieta de este tipo, aunque sea de forma temporal. 

Sin embargo, para un carnívoro convencido, adoptar una dieta vegana -sin nada de carne, pescado, lácteos o huevos- suena algo dramático. Pero la tendencia de dejar de comer productos animales temporalmente es cada vez más popular. 

Veganos en la ciudad

Desde hace unos años, el ser vegetariano/vegano dejó de ser algo excéntrico en Mérida; atrás quedaron los días en los cuales se pensaba que al eliminar de la dieta productos de origen animal la hora de comer se transformaría en algo aburrido e insípido.

Hoy, llevar este tipo de alimentación gana más adeptos, proliferando también diferentes opciones para comer.

Entre las motivaciones de los adherentes no sólo está el mejorar la calidad de vida, sino que la elección pasa por cuidar el medioambiente, pues el consumo de carne industrial agrava la mayoría de los problemas ambientales, como la deforestación, la erosión, la escasez de agua potable, la contaminación atmosférica y del agua, el cambio climático y la pérdida de biodiversidad. 

También hay principios filosóficos que dan base a esta opción de vida y que se relacionan con la no violencia. Por ello, en la actualidad son varias las alternativas de restaurantes vegetarianos que nada tienen que envidiarle en creatividad, sabor y exclusividad a los platos que incluyen carne.

'Huelen' la información

• El grupo Vegan Mérida fue fundado hace tres años; Felipe explica que hay más de cuatro mil veganos en el país, ‘hay como dos mil más, pero me he dado cuenta de que son curiosos, que entran a los grupos nada más por información.

Le buscan sustitutos a sus comidas  cotidianas

Es habitual hablar con una persona no vegana y que ésta pregunte extrañada: “Pero si no comes ni carne, ni pescado, ni huevos, ni queso ¿entonces, qué comes?”, señala Samantha Robertos, nutrióloga egresada de la Universidad Modelo y vegana.

“Lo que está claro es lo que no come un vegano, pero la opinión generalizada es que se tiene poco de dónde elegir. Veremos que esto no tiene por qué ser verdad, es sólo un punto de vista, y hablaré de la infinidad de posibilidades que tiene una dieta vegana y también daré mi opinión y experiencia sobre qué alimentos son los más adecuados”, mencionó. 

Señaló que una postura habitual en la gente que comienza una dieta vegana es buscar sustitutos de lo que comía antes.

Por ejemplo, intentará encontrar un sustituto al filete de antaño o algo parecido al queso. El tofu y el seitán lo podrían ser de la carne y el pescado, por su similar contenido en proteínas y textura.

En su opinión, no es que la postura sea equivocada, simplemente no es necesaria: “No tienes por qué buscar alimentos parecidos a los que comías antes, ya que estos están procesados, buscando un aspecto o textura similar a los productos animales (hamburguesas veganas, quesos veganos). No digo que sean insanos, pero no conviene abusar de los alimentos procesados. Si te gustan, cómelos de vez en cuando”.

Y volviendo a la pregunta ¿qué come un vegano?, recalcó que la respuesta es sencilla: productos vegetales, frutas, verduras, cereales, frutos secos, semillas, legumbres, hongos y setas.

“Creo que la correcta pirámide de la alimentación vegana tiene en su base las frutas, después las verduras, después los cereales integrales, seguidos de las legumbres y en el pico superior los frutos secos y semillas”, explicó.