|
Puedes usar las cáscaras de los cítricos como macetas para germinar semillas o para sacarle raíz a una plantita. (labioguia.com)
Compartir noticia en twitter
Compartir noticia en facebook
Compartir noticia por whatsapp
Compartir noticia por Telegram
Compartir noticia en twitter
Compartir noticia en facebook
Compartir noticia por whatsapp
Compartir noticia por Telegram

Agencia
CANCÚN, Q. Roo.- La jardinería es una actividad que requiere mucho trabajo, hay que prestarle atención a las pestes, asegurarse de que los cultivos tengan todos los nutrientes necesarios y supervisar el riego, especialmente en Quintana Roo, donde hace calor casi todo el año.

Sin embargo, existen algunos trucos, compartidos en el portal labioguía.com, que pueden hacer que las tareas sean más sencillas. Ponlos en práctica para trabajar como un jardinero experto.

También te puede interesar: Siete vegetales que compras una vez y los tendrás siempre 

1. Planta tus semillas en cáscaras de huevo
¿Sabías que las cáscaras de huevo le aportan calcio al suelo? Además, se convertirán en abono cuando las entierres. Planta tus semillas dentro de ellas cuando las condiciones climáticas no te permitan sembrar en exteriores. Cuando puedas llevar tus plantas afuera, no necesitarás sacarlas de la cáscara, podrás enterrarlas con ella.

2. Usa tenedores plásticos para evitar que los animales destrocen tu jardín

 

Esta es una excelente idea para reutilizar tenedores de plástico. Simplemente deberás clavarlos entre tus cultivos para evitar que los animales los rompan.

3. Coloca una maceta dentro de otra para cambiar las plantas con mayor facilidad

Para los amantes del paisajismo, este truco será de gran ayuda. Antes de colocar una planta estacional, cava un agujero en la tierra y entierra una maceta vacía. Dentro de ella coloca otra maceta con la planta que quieras. Así, te resultará mucho más sencillo cambiarla cuando sea necesario.

4. Usa una botella de vino para regar tus plantas lentamente
Limpia bien la botella una vez que esté vacía. Si tiene tapa, usa un clavo y un martillo para hacer un pequeño orificio. Si tenía un corcho, puedes llenarla con algunas piedritas. Cualquiera de estas dos alternativas servirá para hacer que el agua baje lentamente y mantenga el suelo húmedo.

5. Coloca filtros de café en el fondo de las macetas para evitar que se drene toda el agua

Coloca un filtro de papel entre la maceta y la tierra. El agua podrá salir por el drenaje, pero lo hará más despacio. Así, la tierra tendrá más tiempo de absorberla.

6. Fertiliza tus plantas con el agua de cocción
El agua donde cocinas tus vegetales tiene muchísimos nutrientes que pueden ayudar a que tus plantas crezcan más sanas y fuertes. Antes de verterla sobre la tierra, asegúrate de que se haya enfriado por completo.

7. Siembra en la cáscara de una fruta cítrica
Además de quedar muy bonita, la cáscara servirá como abono para el suelo cuando necesites enterrar tu vástago. Para el drenaje, puedes hacer un pequeño orificio en la base.

8. Asegúrate de que tus semillas estén en buen estado antes de plantarlas
Para ello, toma un trozo de papel de cocina y humedécelo. Luego dóblalo al medio y colócalo sobre una superficie plana. Por encima, acomoda algunas semillas, dejando un poco de espacio entre cada una. Dobla el papel nuevamente, de manera tal que cubra las semillas. Guárdalo en una bolsa con cierre hermético y déjalo en un lugar cálido, lejos de la luz solar. Cada tres días, revisa las semillas. Tal vez necesites agregar un poco más de agua.

9. Identifica tus cultivos usando rocas

Junta algunas rocas, decóralas y úsalas para marcar lo que cultivaste en cada sitio.

10. No ensucies tus uñas al trabajar en el jardín
Antes de comenzar a trabajar con la tierra, rasguña una barra de jabón. Cuando te laves las manos, notarás que tus uñas siguen estando impecables.

11. Planta las sobras
Hay algunos vegetales que sólo debes comprar una vez. A partir de sus sobras puedes hacer que crezcan de nuevo. La albahaca, las zanahorias y el ajo son algunos ejemplos. 

12. Usa especias para evitar que se pudran las semillas

Muchas especias son potentes antioxidantes con propiedades fungicidas y antibacteriales. La canela, el clavo de olor, la cúrcuma y la mostaza son las mejores opciones. Rocía alguna de ellas sobre el suelo cuando plantes las semillas. Cada tanto deberás colocar un poco más, ya que se irán con el riego.

13. Fertiliza  tus plantas con elementos naturales
Los posos de café son excelentes para las plantas acidófilas. La cáscara de plátano aporta potasio para que las flores crezcan con más fuerza. Las cenizas de madera estimulan la maduración de las flores.  

Lo más leído

skeleton





skeleton