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ESPAÑA.- Con la llegada del frío vuelve también uno de nuestros pasajeros pero habituales compañeros de esta época del año: el dolor de garganta. Esta dolencia puede tener diferentes causas, aunque la mayor parte se debe a infecciones bacterianas o virales, como la gripe, o resfriados.

El dolor de garganta, causado por una inflamación en alguna zona de la faringe, es uno de los más frecuentes entre la población. Aunque la toma de analgésicos de venta libre en farmacia, como el paracetamol o el ibuprofeno, pueden ayudarnos, lo primero que debemos hacer es identificar correctamente la causa, y para ello el primer paso debería ser acudir a un especialista, evitando así la automedicación.

En el tratamiento general del dolor de garganta se recetan habitualmente antiinflamatorios y anestésicos locales. En los casos de infecciones bacterianas, como el estreptococo, habrá que recurrir a un antibiótico, publicó el portal Levante.

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La cultura popular, sin embargo, suele prescribir una serie de remedios cuando tenemos esta molestia, aunque no en todos los casos la ciencia respalda sus presuntos efectos beneficiosos.

En el caso de la miel, por ejemplo, sí puede actuar como calmante local de la zona, al igual que el agua con limón. Pero por sí solos no son capaces de acortar los plazos de estas dolencias. Sin un efecto antiinflamatorio evidente, el dolor de garganta no desaparecerá cuando la molestia se percibe, por ejemplo, en la deglución.

¿Sirven los remedios caseros?

El agua como limón, o la ingesta de líquidos en general, sí ayuda a contribuir a mantener el cuerpo hidratado, un factor que consigue que la saliva sea más fluida, lo que hará que la garganta se resienta menos durante los días que pueda durar la inflamación.

En el caso de una infección local, el limón también ayudará a desinfectar la zona.

Tampoco están claros los beneficios reales de las naranjas u otros alimentos con un gran aporte de vitamina C, que muchas veces se recomiendan como los mejores aliados para prevenir o acelerar los procesos, virales o catarrales que puedan acompañar al dolor de garganta.

Más allá de eso, en el caso de que el dolor de garganta se produzca junto con episodios de tos, sí que serán de ayuda los remedios caseros que puedan hacer que ésta remita, como tomar infusiones, los vahos y, de nuevo, hidratarnos correctamente.