Astros a un paso del triunfo: dejan fuera a los Dodgers
El estelar lanzador de Los Ángeles salió del 'dugout' con ventaja de tres carreras.
Agencia
ESTADOS UNIDOS.- Fue probablemente el partido más emocionante que se haya visto en una Serie Mundial 2017, con 25 carreras, con un festival de batazos y con unos Houston Astros que viajan a la casa de los Dodgers de Los Ángeles con ventaja de 3-2.
Nadie se habría imaginado que un partido con Clayton Kershaw y Dallas Keuchel como abridores acabaría con marcador de 13-12, pero así pasó.
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Si la misión de los Astros de tener enfrente a Kershaw era difícil de antemano, el estelar lanzador de los Dodgers salió del dugout con ventaja de tres carreras.
Logan Forsythe aprovechó que tuvo la casa llena y conectó un sencillo al izquierdo productor de dos carreras, al llevarse a Chris Taylor y Justin Turner. Acto seguido, Forsythe intentó un robo de base y Keuchel reviró a primera, pero el tiro a segunda de Yuli Gurriel fue muy malo y provocó que el corredor llegara y que en bola ocupada llegara Yasiel Puig a home para el 3-0.
Cuarta entrada
Kershaw no dio su brazo a torcer y se mantuvo dominante, acorde a lo esperado. En el primer tercio de partido sólo aceptó un imparable y sus compañeros le brindaron más apoyo en la cuarta entrada, cuando Forsythe anotó gracias a un sencillo de Austin Barnes el 4-0 parcial
En la octava, Corey Seager acercó a los Dodgers con un doblete para que anotara Joc Pederson, pero, de nuevo, los Astros no dieron pie a que fuera a más, porque Brian McCann se voló la barda en solitario para marcar el cuadrangular 21 de esta Serie Mundial y empatar el récord histórico que ostentaba el Clásico de Otoño de 2002 entre los Angels y los Giants.
Pero los Dodgers no se dejaron caer. En la novena, el bat de Yasiel Puig despertó para pegar un cuadrangular de dos carreras -el 22- y llevarse por delante a Cody Bellinger, y después un sencillo por el central de Chris Taylor empujó a Austin Barnes. Sí, 12-12. Sí, nueve entradas, 24 carreras y casi 400 lanzamientos no bastaron para definir qué equipo viajaría a Los Angeles con la ventaja. Ya nadie se acordaba que Clayton Kershaw y Dallas Keuchel eran los abridores. Ya sólo un pestañeo podía acabar con todo.
Y ese pestañeó llegó en la décima. Con hombres en primera y segunda, Alex Bregman partió el diamante en dos y llevó a Derek Fisher a home para dejar tendidos a los Dodgers y a su cerrador estelar Kenley Jensen.
Con información de: Univisión