Agencia
ESTADOS UNIDOS.- Emotivo reencuentro de joven basquetbolista lituano con su madre, luego de cinco años sin verse.

Norbertas Giga dejó su casa en 2013 para seguir su sueño y estudios, su equipo Jacksonville State Gamecocks recompensó su entrega en la duela con una gran sorpresa, informó Vanguardia MX.

Luego de años de no ver a su madre, el basquetbolista lituano Norbertas Giga se reencontró con ella gracias a su equipo en los Estados Unidos.

También te puede interesar: Dustin Johnson llega al World Golf Championship México

“Un enorme agradecimiento a todo el mundo que estaba involucrado en esta sorpresa para mí. Ni siquiera puedo explicar lo mucho que significa y cómo se siente este momento para mí. ¡Gracias! ¡Somos Gamecocks!", Norbertas Giga, basquetbolista lituano.

El joven de 22 años recibió la sorpresa de su vida al ver por primera vez a su madre desde que dejó su natal Lituania en 2013 para ir a Estados Unidos a jugar baloncesto.

Su equipo, Jacksonville State Gamecocks, hizo posible el reencuentro cinco años después.

Con la finalidad de aprovechar una beca deportiva que le permitiera seguir sus estudios universitarios y jugar el deporte que ama, Giga se enlistó en la la Universidad Estatal de Florida en 2013 y luego pasó en 2016 a la Estatal de Jacksonville, Alabama.

El alero, un joven con mucho potencial, logró sumar 362 puntos en 33 partidos durante su primera campaña con Gamecocks. Esta campaña, la 2017-2018, tiene 256 puntos en 31 partidos disputados.

A HUGE Thank You to everybody that was involved in this surprise for me. I can’t even explain how much it means and how this moment feels to me. THANK YOU! We are Gamecocks! https://t.co/wvCBb3neyZ

— Norbertas Giga (@norbertasgiga) 28 de febrero de 2018

Por ese gran esfuerzo, su equipo buscó recompensarlo y traer a su madre a América fue la mejor idea.

El joven fue citado por su entrenador para supuestamente analizar un video, para su sorpresa, la puerta se abrió y salió su madre. Giga no podía creerlo, su emoción fue tan grande hasta el llanto, terminando la escena en un emotivo abrazo.

Un momento muy emotivo que jamás olvidará y que ha querido agradecer públicamente a la Universidad de Jacksonville.