'La jaula de oro' gana premio en Cannes

La película de Diego Quemada obtuvo el premio Pontercorvo, por mostrar "compromiso social, vigor y frescura cinematográfica".

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El director hispano-mexicano Diego Quemada-Diez recibió el premio Gillo Pontecorvo. (Notimex)
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EFE
CANNES, Francia.- "La jaula de oro", coproducción hispano-mexicana que compite en la sección "Una cierta mirada" del Festival de Cannes, ha llevado al corazón cinematográfico mundial una historia que su director, el español Diego Quemada-Díez, define como un "poema épico" sobre la emigración.

El viaje clandestino de tres adolescentes guatemaltecos hacia Estados Unidos le sirve para acercar la mirada hacia una problemática que a menudo criminaliza a sus protagonistas, y que pocas veces indaga en las razones y en las vivencias experimentadas.

La idea, según explicó Quemada-Díez en entrevista con EFE, era que esa película arraigada en la realidad se convirtiera "en un espejo en el que nos podamos reflejar", y provocara la reflexión con la esperanza de "crear un impacto".

El director, que tras haber vivido los últimos 18 años en Estados Unidos y México contaba con la perspectiva de ambas visiones, entrevistó a más de 600 emigrantes y desde el momento en que habló con ellos dijo haber sentido que "eran héroes que estaban arriesgando su vida" y que tenía que contar su historia.

Su periplo no es solo literal, sino también metafórico: "Es un viaje iniciático, una prueba en la que poco a poco ellos se van convirtiendo en adultos. (...) En el fondo es el viaje de la vida. Tenemos que lidiar con las pérdidas, seguir adelante, y al final el destino no es tan importante, lo más importante es el camino".

Quemada-Díez concentró en sus tres protagonistas los testimonios recogidos, y los puso en la piel de unos adolescentes y de actores no profesionales buscando a la vez un mayor realismo e impacto emocional, con ese mismo método inspirado, según él, en el "neorrealismo y la nouvelle vague".

En el argumento de este proyecto encontró además todo los elementos necesarios para extender su denuncia al materialismo imperante en la sociedad occidental, "tremendamente destructivo", a su juicio, "porque cosifica al ser humano".

"Es como una trampa en la que caemos todos con facilidad. De alguna manera, una derivación de nuestro progreso industrial. Creemos que el progreso material nos va a traer la felicidad y nos olvidamos del desarrollo humano y espiritual".

Por eso, el tren al que se van subiendo y bajando sus protagonistas adquiere un papel protagonista y, según añade su director, también metafórico.

El director busca "que la voz de los migrantes pueda ser escuchada en el mejor festival del mundo"

"Simboliza esta máquina de la industrialización, que devora personas y materias primas, porque cada vez quiere ir más rápido y producir más, y va destruyendo la tierra, culturas y todo lo que encuentra por delante sin ni siquiera saber hacia dónde va".

Que la película haya llegado al Festival de Cannes, donde coexisten en doce días toda la frivolidad y el glamour que rodea al cine con la programación de películas de mayor profundidad, le parece, además de sorprendente, una oportunidad privilegiada de denuncia social.

"Que la voz de los migrantes pueda ser escuchada en el mejor festival del mundo es muy importante para la comunidad mexicana y centroamericana que vive en Estados Unidos", añadió el director, que se ha nutrido de la experiencia adquirida al trabajar con grandes de la industria, como Oliver Stone o Ken Loach.

Y frente a las ilusiones de los protagonistas de su película y las de quienes los han inspirado en la vida real, que se alimentan en la esperanza de encontrar más allá de sus fronteras esa realidad mejor, Quemada-Díez se recrea en la idea de que en el fondo no es más que otra ilusión.

"No creo que haya democracia en estos momentos, ni en España ni en Estados Unidos, y esperemos que podamos ir despertando para crear una sociedad más justa y no pensar que lo van a hacer por nosotros", concluyó el cineasta, que por ser esta su ópera prima aspira además a la "Cámara de Oro".

La película fue estrenada el miércoles en Cannes y recibió una muy buena acogida del premio y de la crítica y es una de las favoritas a premios en la sección Una Cierta Mirada, la segunda más importante del certamen en la que compite.
 
El palmarés de Una Cierta Mirada se anunciará este sábado y el domingo, en la jornada de clausura, se conocerá al ganador de la Cámara de Oro, trofeo que reconoce al mejor primer largometraje del Festival de Cannes, al que también aspira "La jaula de oro".

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