Agencias
CIUDAD DE MÉXICO.- La cantante Ariana Grande vivió los peores días de su vida luego de aquel ataque terrorista en uno de sus conciertos en Manchester, donde bombas fueron accionadas causándole la muerte a 22 personas y dejando a muchas otras heridas, así lo aseguró Scooter Braun, manager de la artista, en el podcast The Big Questions with Cal Fussman.

También te puede interesar: Elton John cancela dos conciertos por... ¿la boda real?  

De acuerdo con el portal Infobae, Braun, quien también representa a Justin Bieber, dijo que la estrella del pop quedó devastada cuando se enteró que algunos de sus fans habían muerto en el ataque. "Lloró durante días, todo llegaba a sus sentimientos: por cada rostro que se anunciaba, por cada nombre, abría su corazón. Sentía cada pequeña emoción porque así es ella", relató.

Foto: Twitter @Peter709630.

Tras el ataque, Grande y Braun visitaron a las familias de las víctimas y a los lesionados en el hospital de niños Royal Manchester. Según recuerda Scooter, fueron las horas más difíciles que vivieron: "Después de ver a la primera familia, la tuve que ayudar. Ella estaba devastada y yo me sentía perdido. Fue demasiado duro, pero cada vez que nos veníamos abajo recordamos que nosotros sí volveríamos a casa".

El representante de la artista también habló sobre la difícil decisión que debió tomar Grande de continuar con la gira tras el atentado. "No teníamos derecho a estar tan tristes que no pudiéramos continuar. Los terroristas se equivocaron. Eligieron el show equivocado", aseguró. "Si pensaron que nos íbamos a rendir, no conocen a Ariana y tampoco me conocen a mí", agregó.

El 4 de junio Grande volvió al escenario en Manchester, donde encabezó un concierto benéfico con el fin de recaudar fondos para las víctimas de las familias afectadas por el ataque.

Foto: Hello.