Staff/Agencia Reforma
MÉXICO, DF.- Esteban Loaiza no puede creer que su aún esposa, Jenni Rivera, haya muerto, y no se resignará sino hasta que la familia de la cantante le informe que sí es ella a quien encontraron en Monterrey, donde se estrelló la avioneta en la que ella viajaba.

En declaraciones al programa El Gordo y La Flaca, el ex beisbolista dijo que su divorcio de La Diva de la Banda no se concretó y se negó a hablar de dinero ahora que ella murió.

"Dios es el que sabe y de lo que viene y el dinero, de eso no puedo hablar. Eso ya es otra cosa, eso ya es otra cosa (el divorcio). Estoy sin creerlo. Quiero saber la verdad, ya que están los hermanos, mis cuñados, allá pero no me contestan las llamadas. No puedo creer que esté muerta hasta que me marquen ellos.

"Se dicen muchas cosas en los medios y en internet, no sabemos qué es verdad. Estamos esperanzados como todo el mundo, fans y familias, no creemos lo que está pasando, voy a esperar a que me marquen".

Rosy Saavedra, madre de la intérprete, comentó al programa Despierta América que Loaiza ha tratado de comunicarse con ellos, pero no han podido contestarle.

"Me llamó, pero mi teléfono ha estado desconectado. Le quiero decir a Esteban que lo quiero, no hay ningún rencor. Sé, Esteban, el amor que le tienes a mi hija y pues suceden cosas, pero en mi corazón hay amor y perdón para ti", comentó.

Esteban Loaiza y Jenni Rivera se casaron en 2010 en Los Ángeles; en octubre pasado, sin dar razones, ella dio a conocer su separación del ex deportista.

Se ha especulado que Jenni descubrió un amorío entre su hija y su esposo.