Agencias
MÉXICO, D.F.- El general colombiano en retiro Luis Enrique Montenegro, quien fue mando superior de Óscar Naranjo, ex director de la Policía Nacional de Colombia y actual asesor del presidente electo, Enrique Peña Nieto, calificó de retroceso la desaparición de la Secretaría de Seguridad Pública federal.

Desde Bogotá, el consultor internacional, con 40 años de experiencia en el control del crimen organizado y ex subdirector general de la Policía Nacional, dijo a MILENIO que la integración de la SSP y de la Policía Federal a la Secretaría de Gobernación es “un manejo político y no un asunto técnico-científico”.

Entre 1989 y1990, Montenegro fue director de Investigación Criminal en Colombia; era la época “dura” de la lucha contra el capo Pablo Escobar, jefe del cártel de Medellín. En aquellos años el general Naranjo —entonces coronel— era su subalterno como jefe de la sección de inteligencia y posteriormente también estuvo bajo sus órdenes en la guerra con el cártel de Cali.

Ambos son considerados artífices, cada uno en sus respectivos cargos y frentes, por el desmantelamiento de las poderosas organizaciones criminales y la caída de Escobar, así como de Miguel y Gilberto Rodríguez Orejuela.

En entrevista, Montenegro opinó que la desaparición de la SSP va a contracorriente de la tendencia mundial de tener una policía independiente. “Se debe construir sobre lo construido, esta decisión solo da ventaja a los delincuentes. No se puede improvisar. Para mí esto es manejo y cuestión política, no un asunto técnico ni científico”.

Montenegro: “Lo lógico

es construir sobre lo construido 

Señaló que en Centroamérica y Europa la tendencia es que las policías federales o nacionales dependan de un ministerio que se encargue exclusivamente de garantizar la seguridad nacional frente al crimen organizado, mediante un trabajo coordinado con fuerzas militares y otras agencias nacionales e internacionales.

“Lo lógico es construir sobre lo construido, en todo caso hacer ajustes en la SSP para lograr mayor eficiencia en el manejo de las políticas de seguridad pública, conociendo sus debilidades y fortalezas, pero no bajarle el perfil subordinándola a Gobernación. Es un error garrafal”.

Refirió que la respuesta al crimen es de carácter policial, no militar, y cuestionó si la Secretaría de Gobernación, con las múltiples encomiendas que tiene en política interior, tendrá tiempo para atender de manera adecuada el frente contra la delincuencia.

“Constituye un retroceso a todo el trabajo de la SSP y Policía Federal, porque se le quita peso al perfil de sus funciones; subordinarla a otra entidad que cumple tareas múltiples es darle ventaja a los delincuentes.

“El Ministerio de Gobernación cumplirá múltiples tareas, como coordinar el gabinete presidencial, desarrollar relaciones políticas del Ejecutivo y ahora absorberá las funciones de seguridad pública. La pregunta es a qué hora le va a dedicar tiempo suficiente al desarrollo de la política anticriminal. Es echar en saco roto todo lo ganado frente al crimen organizado”

Montenegro comentó que desconoce si el general Naranjo, por quien expresó un gran respeto y reconocimiento a su trabajo de inteligencia policial, tendrá alguna injerencia como asesor externo en la decisión de desaparecer a la SSP.

—¿La desaparición de la SSP es parte de la estrategia que realiza el general Naranjo como asesor en materia de seguridad de Peña Nieto?

—Desconozco esta situación, faltaría a la verdad si emito una opinión. Siempre durante mi gestión en la policía Naranjo realizó con éxito tareas de inteligencia. Tuve el honor de asistir como invitado a la ceremonia de imposición de condecoración que le otorgó el gobierno federal el 2 de junio de 2012 en la Ciudad de México.

—¿Cuál fue la relación de trabajo que tuvo con el general Naranjo?

—Yo me retiré en el año 2000 de la policía como subdirector, años anteriores en la época de la lucha contra el cártel de Medellín y Pablo Escobar, años 89-90, él (Naranjo) manejaba la inteligencia policial y yo la Dirección de Investigación Criminal, de la cual él dependía de mí, él era mi subordinado. Excelente trabajo de inteligencia el que realizó... porque se logró acabar con el cártel de Medellín.

—Pero no terminó ahí su contacto…

—Cuando yo estuve en la subdirección que empezamos en los años 94-95 en la lucha contra el cártel de Cali, él manejó la Dirección de Inteligencia que se creó exclusivamente para manejar inteligencia y se separó de la Dirección de Investigación Criminal.

Yo como subdirector lógicamente, él trabajaba para el director de la policía y para mí frente a la lucha contra el cártel de Cali y de verdad que era meritoria la labor. Y después que yo salí, ocupó el cargo de director de la Policía Nacional.

—¿En Colombia cómo funciona la Policía Federal o su equivalente?

—Ante el conflicto interno con guerrillas, dependemos del Ministerio de la Defensa, como Policía Nacional, a igual nivel que fuerzas militares. Al terminarse el conflicto seguramente saldremos de este ministerio y se creará un ministerio de la seguridad de quien dependeremos junto con el manejo de prisiones y seguridad privada, como es la tendencia mundial que desarrolló México y de la que ahora da marcha atrás, y que incluso puede repercutir en la desmoralización de los casi 36 mil efectivos que integran la SSP.