Agencias
MÉXICO, D.F.- La PGR indaga si los militares involucrados en el caso Tlatlaya, en el Estado de México, “videograbaron” el enfrentamiento contra presuntos integrantes de la delincuencia organizada, como establece el Manual del Uso de la Fuerza, de aplicación común a las tres fuerzas armadas”. También indagan si tomaron las medidas operativas necesarias y de respeto a los derechos humanos.

En el apartado “Acciones previas del capítulo III” de la guía que emitió en mayo de 2014 por el alto mando del Ejército, Fuerza Aérea y Armada, se lee: “Se debe contar con cámara de videograbación, fotográfica o instrumentos de grabación de sonido para estar en condiciones de aportar medios de prueba fehacientes sobre la actuación del personal de las fuerzas armadas en operaciones”.

Funcionarios del gabinete de seguridad nacional informaron que se analiza si los elementos del Ejército relacionados con la muerte de 22 personas (en lo que la Sedena califica hasta el momento de enfrentamiento derivado de una agresión armada) se condujeron de manera adecuada y apegados al manual, informa Milenio.

Lo anterior es independiente de la indagatoria de la Procuraduría de Justicia Militar, que por lo pronto envió a prisión del Campo Militar Uno del DF a un oficial y siete soldados, quienes están a disposición del juzgado sexto por su presunta responsabilidad en delitos contra la disciplina militar, desobediencia e infracción de deberes.

Mandos militares dijeron que en el manual se prevé la “grabación” de misiones contra criminales para garantizar el respeto a derechos y evitar acusaciones infundadas contra militares.

Comentaron que la guía se diseñó como herramienta para impedir posibles abusos en las acciones anticrimen, violencia contra personas u otros ilícitos, además de salvaguardar la vida de menores y civiles.

Una mujer, madre de una de las personas sobrevivientes en el caso Tlatlaya, aseguran que militares ejecutaron en una bodega a 22 personas cuando estas ya se habían rendido.