Agencias
CIUDAD DE MÉXICO.- Con mariachi, porras, aplausos y un espectáculo de ballet, el papa Francisco fue recibido en el Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México, a donde llegó aproximadamente a las 19:15 horas.

“¡Queremos que el Papa nos dé su bendición!, ¡queremos que el Papa nos dé su bendición!”, fue uno de los gritos que lanzaron al pontífice las decenas de personas en las gradas instaladas en el aeropuerto capitalino, informa Milenio.

El Papa descendió de la aeronave de Alitalia, que lo trasladó desde Cuba donde hizo una escala para reunirse con el líder de la Iglesia ortodoxa rusa, y fue recibido por el presidente Enrique Peña Nieto y por la presidenta del Consejo Ciudadano Consultivo del DIF Nacional, Angélica Rivera.

Francisco conversó durante algunos minutos con el Presidente y después cuatro niños vestidos con trajes regionales le entregaron un cofre con tierra mexicana para bendecirla.

La ceremonia de bienvenida incluyó la interpretación de la canción “México se pinta de luz”, creada con motivo de la visita del papa Francisco, y también hubo un espectáculo de danza del ballet de Amalia Hernández.

Calles repletas

Tras su llegada a la Ciudad de México y luego de la reunión privada con el presidente Enrique Peña Nieto en la sala de espera del hangar presidencial, el papa Francisco abordó un vehículo descubierto para trasladarse a la Nunciatura Apostólica.

En tanto, las campanas de la Catedral Metropolitana repicaron en celebración a la llegada del papa Francisco, a tres minutos de que descendiera del avión en el que llegó al país.

Aproximadamente a las 20:10 horas, el pontífice salió del aeropuerto capitalino en el papamóvil, en el que recorrerá 19 kilómetros hasta llegar a su destino, en la colonia Guadalupe Inn.

En su trayecto, decenas de personas que se congregaron desde varias horas antes en la ruta que recorrería, le dieron la bienvenida con porras, ondeando banderas, con lámparas y las pantallas de su celular prendidas. En otros sitios los asistentes entonaron el "Cielito lindo".

La ruta que recorre el Papa en el vehículo es Santos Doumont, Fuerza Aérea Mexicana, Circuito Interior, Río Churubusco e Insurgentes Sur, vialidades que fueron cerradas a la circulación desde las 16:30 horas.

Decenas de fieles llegaron a la avenida Río Churubusco en su cruce con División del Norte para observar el paso del Papa, donde hay un importante dispositivo de seguridad integrado por policías de la SSP de la Ciudad de México y elementos del Ejército mexicano.

Jóvenes integrantes de las vallas humanas, identificados con un chaleco representativo, ambientan el lugar con porras “Francisco, te quiere el mundo entero, y Francisco, tú eres misionero”.

Las calles aledañas a este sitio se encuentran cerradas a la circulación de automóviles, y en una de ellas se ubica un puesto de servicio médico del gobierno capitalino por cualquier contingencia que pudiera suceder.