Ayotzinapa, un año después de la desaparición de los 43

Los padres de los jóvenes no han cesado en sus exigencias y rechaza que el presidente Peña Nieto viaje a Nueva York en víspera del aniversario.

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Al cumplirse doce meses de que desaparecieron los 43 normalistas de Ayotzinapa, en varias ciudades de México y el mundo se esperan multitudinarias protestas. La imagen corresponde a la embajada mexicana en Buenos Aires, Argentina. (AP)
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Agencias
MÉXICO, D.F.- Después de la desaparición de 43 estudiantes, la Normal Rural "Raúl Isidro Burgos" de Ayotzinapa dejó de ser un lugar al que los jóvenes de Guerrero aspiraban a ingresar.

Este año recibió apenas 500 solicitudes, menos de la mitad de las que recibía antes de la desaparición de los 43, tras los ataques en Iguala la noche del 26 y madrugada del 27 de septiembre de 2014.

Desde el 29 de septiembre pasado, los padres de los normalistas se instalaron en la escuela, en algunas ocasiones impidiendo que se diera clases. En enero tomaron por completo el control de la normal.

"Al principio solo se encontraban en algunas aulas y en los dormitorios, permitiendo las actividades en la dirección. Después decidieron que los maestros ya no tendrían acceso", dijo en entrevista con Milenio uno de los maestros, quien por seguridad pidió no revelar su nombre.

Eso no impidió que el ciclo escolar continuara. La generación 2012-2015 se gradúo el 22 de julio pasado.

Sin embargo, este año las solicitudes de ingreso para la Normal Rural "Raúl Isidro Burgos" bajaron de manera considerable.

Muchas menos solicitudes

El director de la normal, José Luis Hernández Rivera, dijo que al año recibían más de mil solicitudes para quedarse con los 140 lugares que ofrecen en las dos carreras que imparten. Este año fueron apenas 500.

"Primero llegaron sólo 198 para anotarse para concursar por un espacio, algo que nunca le había sucedido al plantel. Después teníamos 300 solicitudes, al final solo 500 jóvenes buscaron un lugar, cuando llegamos a acumular más de mil solicitudes en años anteriores", dijo.

De los 140 estudiantes que entraron a primer año en 2014, solamente quedan 99. El resto son del grupo de desaparecidos en Iguala. El director no quiso especificar cuántos estudiantes de primer ingreso están entre los 43.

La generación que ingresó a la normal en agosto pasado está conformada por 100 alumnos de la licenciatura en Educación Primaria y 40 de la licenciatura en Educación Primaria con Enfoque Intercultural Bilingüe.

La Escuela Normal Rural "Raúl Isidro Burgos" empezó a funcionar en 1926 en los diferentes barrios de Tixtla, no tenía un edificio y solo se daban clases los fines de semana. En 1933 comenzó a funcionar como secundaria, normal e internado. Por sus aulas pasaron los líderes guerrilleros Lucio Cabañas y Genaro Vázquez.

A un año

Cuando este sábado se cumplan 12 meses de la desaparición de los estudiantes, en varias partes del país e incluso del mundo se realizarán sendas marchas y protestas.

Este episodio representó un fuerte golpe a la imagen y credibilidad del gobierno del presidente Enrique Peña Nieto, y desde entonces no ha variado la exigencia de los padres de los jóvenes para que el gobierno siga buscando a sus hijos.

El jueves, Peña Nieto se reunió por segunda vez con los padres de los 43, a quienes ofreció crear una fiscalía especializada que investigue lo ocurrido con sus hijos.

No obstante, algunos medios le reprocharon que viajara a Nueva York para asistir a la Asamblea General de las Naciones Unidas, ausentándose del país al cumplirse este primer aniversario.

Tras el encuentro, que duró cerca de tres horas, el vocero del mandatario, Eduardo Sánchez, afirmó que Peña dijo a los padres y familiares de los jóvenes desaparecidos el 26 de septiembre de 2014 que el gobierno "está de su lado" y que las dependencias vinculadas al caso "tienen instrucciones de escucharlos y apoyarlos en todo momento".

"Trabajamos con el mismo objetivo: saber qué sucedió con sus hijos y castigar a cada uno de los responsables. Busquemos juntos la verdad", afirmó el jefe de Estado, de acuerdo con el portavoz.

Sánchez dijo que la investigación sobre lo ocurrido "no se ha cerrado y no habrá carpetazo" en el asunto.

Palabra deshonrada

En el documento que entregaron a Peña al iniciar la reunión, le lanzaron duras recriminaciones, le dijeron que no confían "en sus instituciones y en su gobierno, que dolosamente buscaron engañarnos".

También le reprocharon que en su primer encuentro, a un mes de la desaparición de los estudiantes, haya asumido compromisos que no cumplió "cabalmente" y le recriminaron que "su palabra no fue honrada".

A Peña, los padres le pidieron crear una "oficina especializada" que replantee la investigación y sea supervisada internacionalmente para investigar "dónde están" los jóvenes porque no creen en la versión de la Procuraduría General de la República.

De acuerdo con las pesquisas oficiales, basadas en un centenar de testimonios de detenidos, los estudiantes fueron entregados por policías municipales a la banda criminal Guerreros Unidos que los asesinó y quemó sus cuerpos en un basural en Cocula, ciudad vecina a Iguala, pero los padres creen que se trata de "un montaje".

Posible represalia

Un reciente informe de expertos independientes de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) concuerda con algunas tesis del gobierno, como la de que los estudiantes fueron entregados a una organización criminal, pero difieren en cuanto a si fueron asesinados y sus cuerpos quemados en un vertedero y en relación a las posibles causas de su desaparición.

Los especialistas creen que podrían haber sido objeto de represalias porque en uno de los autobuses donde iban llevaba droga, dinero o armas.

Según el gobierno, las víctimas fueron confundidos con miembros de la banda Los Rojos, enemiga de Guerreros Unidos, y por eso fueron asesinados. Los padres y compañeros de los jóvenes dicen que estos habían ido a Iguala secuestrar buses para viajar el 2 de octubre pasado a la conmemoración de una matanza de estudiantes ocurrida en 1968 en la capital mexicana.

Otras versiones aseguran que llegaron a boicotear una ceremonia encabezada por la esposa del alcalde de Iguala Angeles Pineda, que planeaba postularse para relevar a su marido José Luis Abarca, ambos en prisión.

Se esperan este sábado numerosas protestas en diversas ciudades del país y del extranjero. 

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