Agencias
TEPIC, Nayarit.- El Gobierno Federal confirmó un motín en el complejo penitenciario de las Islas Marías donde alrededor de 600 internos protestan por supuestos abusos e irregularidades en este centro penitenciario, informa milenio.com

De acuerdo con autoridades, los internos exigen más horas de esparcimiento y mejor calidad en los servicios alimentarios.

No se ha registrado ningún enfrentamiento y no se reportan heridos. Por su parte, la Policía Federal comenzó un diálogo con los inconformes.

Los internos han quemando colchonetas y madera como protesta, cabe señalar que el penal alberga a alrededor de 8,000 mil reos

El Gobierno federal en unos minutos dará a conocer un comunicado de prensa oficial sobre lo sucedido.

Operativo de Seguridad

El fiscal general del estado, Edgar Veytia, confirmó la aplicación de un operativo de seguridad de fuerzas estatales en las Islas Marías en Nayarit.

Según dijo en entrevista con Notimex, la Federación solicitó al estado la coordinación para sobrevolar la zona en el helicóptero Apache y realizar un reconocimiento en el lugar.

Edgar Veytia destacó que corresponderá a las autoridades federales proporcionar la información de lo que ocurre en el interior del penal, pero en tanto, la policía nayarita realiza un operativo en la parte norte de la zona costera del estado.

Colonia penal

La colonia penal de las Islas Marías fue creada por decreto presidencial de Porfirio Díaz en 1905. Entonces se determinó que sólo se enviaría a los criminales de alta peligrosidad a purgar su sentencia en el archipiélago.

De acuerdo con los antecedentes del penal, en más de un siglo de operación jamás ha ocurrido un intento exitoso de fuga de, que actualmente es vigilado lo mismo por policías federales como por un destacamento de la Armada.

Las Islas Marías están ubicadas a 112 kilómetros de las costas mexicanas y sólo es posible acercarse a ellas mediante permiso previo gubernamental, en vuelos o embarcaciones fuertemente vigiladas.

Estas islas han sido objeto de diversos proyectos de diferentes gobiernos. En 2003, el entonces titular de Seguridad Pública, Alejandro Gertz Manero, anunció la intención de desalojar a los presos del archipiélago y construir en ese espacio un Área Natural Protegida que sería administrada por la Secretaría del Medio Ambiente.

El proyecto se descartó un año después, pues en septiembre de 2004, cuando ocupó la secretaría Ramón Martín Huerta, reimpulsó a las islas como centro penitenciario federal.

Posteriormente, en 2005, el entonces subsecretario de Seguridad Pública, Miguel Ángel Yunes, anunció que se ampliaría la capacidad de las Islas Marías, para albergar a 3 mil reos.

En 2009, García Luna presentó ante el Congreso un megaproyecto para construir 12 módulos de alta seguridad para 12 mil reos.

Un cambio

En 2010, el Ejecutivo publicó reformas al Estatuto de las Islas Marías con las que toda la administración y operación del Complejo Penitenciario (su nuevo nombre y ya no Colonia Penal) quedó en manos del gobierno federal.

La reforma fue aprobada por el Congreso en febrero de ese año y se fijó un plazo de 90 días para que la Presidencia expidiera la reglamentación necesaria, incluyendo la relacionada con el perfil criminológico de los reos que podrán ser enviados a las Islas Marías.

Tradicionalmente, a las Islas Marías sólo son enviados reos que ya enfrentan sentencias definitivas e inapelables y quienes han sido condenados por delitos no violentos o están ya muy avanzados en su proceso de readaptación.

Pero en los últimos años ha pasado de ser un apacible exilio para sentenciados por delitos leves que se paseaban con cierta libertad y hasta vivían con sus familias, para convertirse en un centro estratégico donde se concentran unos cinco mil reos con diversos grados de peligrosidad.

En 2006, la población de las Islas Marías era de solo 915 reos y se multiplicó por cinco en los siguientes cuatro años.

Recientemente se han reubicado en el compleo penitenciario a varios reos de diversos penales, sobre todo del norte del país, donde se han registrado hechos violentos.