Hoy, en punto de las 21:00 horas, tendremos una final inédita en la Liga Mx. Las Chivas dirigidas por Matías Almeyda llegan como víctimas a suelo hostil, donde los Tigres del Tuca Ferretti afilan sus garras con miras a un nuevo campeonato.

A pesar de que los rojiblancos terminaron cuatro puestos por delante de los auriazules en la temporada regular (Chivas tercero, Tigres séptimo), los regiomontanos llegan embalados al cotejo más importante del año. Y es que la última vez que Guadalajara pudo ganarle un partido a los Tigres en la campaña regular de la Liga Mx fue en octubre de 2012, cuando Rafael Márquez Lugo y Luis Morales pusieron los goles para el 2-1 final, donde coincidentemente Alan Pulido descontó para los de la UANL.

Es de destacar también que mientras los jaliscienses llegan a la última instancia con un récord de un partido ganado, dos empatados y uno perdido, con una diferencia de cero goles en la Liguilla, los felinos han arrollado todo a su paso con cuatro triunfos al hilo, además de diez tantos a favor y sólo uno en contra en esta fase final.

Sólo con esos datos uno podría decir que los universitarios son amplios favoritos, pero ¿qué tiene la escuadra de Verde Valle que puede inclinar la balanza a su favor? Es de mencionar que históricamente estos dos equipos se han medido dos veces en la fiesta grande del futbol mexicano, y en ambas ocasiones el resultado global ha favorecido al Rebaño Sagrado. En el Clausura 2007 se enfrentaron en los cuartos con un marcador final de 6-3 a favor de la oncena oriunda de la Perla Tapatía. De igual modo, en la fase de los ocho mejores durante el Clausura 2011, Chivas se impuso 4-2 en el global y avanzó a las semifinales.

Tigres tiene sin duda la mejor nómina del balompié nacional y una de las mejores aficiones cuando el balón rueda en el “Volcán”, sin embargo, los rojiblancos han mostrado que saben cómo manejar situaciones de mucha presión ante este equipo, por lo que se espera una final cerrada, trabada y sin un amplio favorito.