Mérida, Yuc.- El índice inflacionario en Mérida en julio pasado llegó a 6.67 por ciento, incluso por arriba de la media nacional que alcanzó 6.44 por ciento, debido principalmente a aumentos en los energéticos, alimentos, bebidas y tabaco.

El Inegi detalló que, en promedio, el público consumidor pagó siete pesos más por productos como aguacate, limón, cerveza, artículos para el cabello, además de energéticos, electricidad y servicios turísticos en general.

De acuerdo con datos del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi), durante el mes pasado la capital yucateca fue la más cara de todo el sureste mexicano, arriba de ciudades como Chetumal, Campeche, Veracruz, Villahermosa y Tapachula.

El fenómeno del incremento de precios ocurrió en la mayoría de las ciudades del país; en esta ocasión, todas las urbes que componen la muestra del Inegi reportaron una inflación por encima del rango objetivo del Banco de México (Banxico) de 3 por ciento +/- un punto porcentual.

El Inegi colocó a Mérida como la capital más cara del sureste en el séptimo mes del año con una inflación del 6.67 por ciento, seguida de Campeche, con 6.61 por ciento.

Así también Villahermosa con 5.91 por ciento; Veracruz, con 5.73, en tanto Tapachula logró un índice del 5.11 por ciento y Chetumal, del 4.61 por ciento, que la situó como la más baja del país.

En su reporte mensual, el instituto precisó que los energéticos, los alimentos, bebidas y tabaco destacaron como los principales impulsores del aumento en el índice de precios.

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Añadió que el índice de aumento de precios de los bienes y servicios de consumo, eliminando la volatilidad de los precios de agropecuarios y las tarifas predeterminadas como las de energéticos y transporte, repuntó 4.94 por ciento a tasa anual, el más alto en ocho años.

El organismo federal aseveró que otro de los factores que empujaron el repunte inflacionario a nivel nacional fue que el componente no subyacente -que comprende los precios de bienes y servicios que son influenciados por factores externos como el clima o los mercados internacionales- registró un aumento de 11.27 por ciento a tasa anual, que enmarca la variación más importante en poco más de 14 años.

Aunque los energéticos moderaron su incremento, se mantienen con un alza de poco más de 10 por ciento.