UCÚ, Yucatán.- Debido al reciente interés que los empresarios han mostrado por los terrenos del municipio de Ucú, ubicado justamente detrás de Caucel, los ejidatarios han sabido aprovechar las ventas para contribuir con su comunidad.

En días pasados el ejido vendió a un grupo de empresarios 800 hectáreas por un total de 124 millones de pesos. Estas grandes extensiones servirán para el desarrollo de fraccionamientos residenciales y un campo de golf, lo que brindará mayor plusvalía a las zonas aledañas.

Pero además de los millones, los dueños originales de las tierras exigieron otros beneficios, entre ellos la remodelación de sus templos católicos.

Según comentó el comisario ejidal de este municipio, Genner Ismael Pech León, en entrevista para Milenio Novedades, otro acuerdo al que llegaron con los compradores es dotar de mobiliario, pintura, entre otras cosas, a las iglesias de la cabecera municipal, en especial a la comisaría de Yaxché de Peón. Lo anterior debido a que estos centros religiosos se encontraban casi "abandonados" y resultan una prioridad para la comunidad.

Sin embargo, esto no fue lo único que requirieron a los empresarios, ya que también solicitaron la pavimentación de algunas calles, un techo para su casa ejidal, apoyos alimenticios para pobladores de escasos recursos y la regularización de 355 solares para los ejidatarios.

El representante ejidal explicó que estos beneficios los han solicitado debido a que la autoridad no ha sido capaz de proporcionarlos, por lo que mucha de la infraestructura se encuentra en evidente deterioro.

De esta manera, los ejidatarios buscan sacar adelante su municipio, cuyas tierras han alcanzado un valor representativo debido al desarrollo de la industria en el vecino poblado de Hunucmá.

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