Hace unas semanas estuvo en Yucatán el comisionado nacional de Arbitraje Médico, José Meljem Moctezuma, quien habló de algo muy importante: las personas ya están acudiendo más a este tipo de instancias como parte de una formación cultural que les permite conocer sus derechos, en este caso respecto sobre la práctica médica y es que no todo tiene que ver con quejas, sino muchas veces con acudir a  recibir orientación.

Yucatán fue sede de  la XXVI Sesión Ordinaria del Consejo Mexicano de Arbitraje Médico, con la participación de los comisionados estatales; en dicha reunión, creo que es importante destacarlo, se abordaron temas que son trascendentales, como la protección de la salud como un derecho humano y la responsabilidad profesional, en donde definitivamente se está tomando en cuenta cada vez más el sentido humano en la atención hacia el paciente. Así como el caso del manejo del expediente clínico, la protección de los datos personales y las obligaciones que se generan en la aplicación de la normativa en esta materia. 

Algo que me quedó muy presente  es que, cuando tengamos dudas acerca de un procedimiento médico-quirúrgico, por mínimo que sea, debemos aclararlo todo antes, saber los riesgos y las complicaciones y no generarnos falsas expectativas.

Además de no pretender ser nosotros los médicos y tratar de pedir cosas extrañas porque las vimos en televisión. Veamos la medicina, aun cuando sea estética, como algo que un profesional está realizando porque sabe lo que hace.

Asimismo, no pensemos que porque el IMSS siempre es el que tiene el mayor número de quejas es el peor servicio, porque debemos tomar en cuenta factores de números y es el que atiende al mayor porcentaje de población, así que esto es proporcional. Si se toman en cuenta las quejas que tiene la medicina privada, entonces nos daría mucho de qué hablar con sus números; así que no satanicemos, porque buenos y malos profesionales hay en todos lados.

La entidad, desde hace 15 años, cuenta con una Comisión de Arbitraje Médico del Estado de Yucatán (Codamedy), a través de la cual se ha formado cada vez más esa cultura en la población de saber que tiene derechos y acercarse y solicitar información; si bien es un órgano que no interpone multas o sanciones, sí es mediador para la solución de conflictos. Así que a seguir utilizando estas instancias, a conocer más sobre nuestros derechos y a exigir cuando algo esté mal.