Víctor Hugo Lizama/SIPSE
MÉRIDA, Yuc.- Muchas personas aun sabiendo que el ajo tiene un sinfín de propiedades no lo consumen por evitar el mal aliento y lo desagradable que suele ser transpirarlo. El ajo chino (o japonés) tiene una particularidad: no nos causa esos pequeños problemas. Además de lo anterior es un aliado ideal para eliminar a dos enemigos de nuestro organismo: el colesterol y los triglicéridos.

Debido a los anticoagulantes del ajo se reduce el nivel de colesterol "malo" (LDL) y se incrementa el colesterol "bueno" (HDL) en la sangre.

Es eficaz contra el ácido úrico: lo ataca aliviando y ayudando las molestias de las articulaciones y músculos, por lo cual lo hace una ayuda para los casos de reuma y gota ciática.

Tiene la propiedad de disminuir el nivel de glucosa en la sangre, incluso en el caso de disfunción del páncreas; funciona como una especia de insulina vegetal leve y nos echa la mano en el equilibrio hormonal.

Por las principales cualidades anti-microbianas, anti-hipertensivas y anti-reumáticas este ajo  ayuda a curar: trombosis, artritis, reumatismo, hipertensión, gastritis, hemorroides, úlceras de estómago, sinusitis, artrosis, enfisema y asma.

Contra el cáncer

Es de gran ayuda para evitar diferentes tipos de cáncer como el de mama, estómago, colon, vejiga y piel por la gran cantidad de nitros amina que posee, impidiendo la reproducción de células cancerígenas. Además, al disminuir el nivel de glucosa en la sangre y liberar al organismo de grasas, mejora el metabolismo y ayuda a perder peso. El ajo chino es el mejor amigo para el sistema digestivo y respiratorio.

En el estómago, el ajo funge como vermicida, corrige el estreñimiento y ayuda a regenerar la secreción gástrica. Es ideal para aliviar casos de anemia y resulta como un buen aperitivo para despertar el hambre.

Disminuye los daños de la nicotina en los fumadores, ejerciendo una función balsámica y antiséptica.

Este producto, muy pequeño, es un gigante aliado de nuestra salud que es ideal incluirlo en la dieta diaria para tener una mejor calidad de vida.

Se consume un ajo en la mañana. No es necesario masticarlo, se puede ingerir como cápsula. 

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