Emprendedores comparten oficinas virtuales y físicas
Mérida se suma a la tendencia mundial de emprender con los centros coworking, un lugar en común donde trabajan en sus propios proyectos.
Cecilia Ricárdez/SIPSE
MÉRIDA, Yucatán.- Con la reciente apertura de dos centros coworking, Mérida se suma a una tendencia mundial que incluye un acompañamiento profesional en el proceso de emprendimiento, el cual llega hasta el involucramiento con inversionistas.
En la ciudad operan con este modelo “Nodo Cowork” (inaugurado en junio) y “Closerme”, que abrió sus puertas este mes; ambos fundados por jóvenes que desean apoyar a sus colegas para crear en la ciudad un polo de atracción de capital. Este esfuerzo se agrega al de las cámaras empresarias, los tres niveles de Gobierno y las instituciones educativas.
Esta forma fue adoptada de Estados Unidos, donde surgió de un trabajo cooperativo en el 2009. Actualmente es replicado en numerosos países del mundo y estados de México, pero hasta este año se introdujo a Mérida.
Los servicios funcionan a través de pagos de membresías accesibles, que permiten que los usuarios ahorren en costos (renta, luz, agua, internet) y adquieran contactos con diferentes perfiles profesionales.
Asimismo, a profesionales independientes, emprendedores y pymes de diferentes sectores compartir un mismo espacio de trabajo, tanto físico como virtual, para desarrollar sus proyectos profesionales de manera independiente, a la vez que fomentan propuestas conjuntas.
El neologismo “cotrabajo” es la traducción al español del término coworking, usado para definir esta actividad.
Tamara Acosta, directora de “Nodo CoWork”, destacó que a tres meses de la apertura del lugar lograron convocar especialmente a estudiantes, quienes encuentran en sus espacios un lugar para trabajar, pero también para ampliar sus contactos y desarrollar aptitudes en diferentes materias y de manera práctica a través de los talleres que imparten.
En este sentido, abundó que los cursos además pueden ser propuestos por los mismos usuarios que deseen compartir su especialidad.
En entrevista, Luis Adolfo Cabrera Mandujado e Israel Arturo Domínguez, fundadores de “Closerme”, indicaron que este tipo de espacios eran necesarios para la ciudad, en especial en el contexto actual en el que el emprendedurismo está adquiriendo un auge y apoyo desde distintos frentes.
En su caso ofrecen un sitio con servicios necesarios para trabajar en áreas comunes, privadas, al aire libre; material de oficina, internet, una recepción, así como propuestas formativas con actividades mensuales enfocadas a diferentes temas como la educación financiera, generación de productos mínimamente viables, desarrollo de tecnología y otros módulos que acompañan al emprendedor hasta el objetivo final del programa: llevarlos a una ronda de inversionistas en la Ciudad de México.
Prevén que eventualmente los inversionistas dirijan su mirada a Mérida y sean ellos quienes vengan para apostar por el proyecto que más les convenga.
¿Qué es el coworking?
El concepto: profesionales de diferentes sectores, autónomos, emprendedores y empresarios comparten el mismo espacio físico para trabajar en sus propios proyectos.
Pero el coworking no sólo es compartir gastos y romper con el aislamiento, también se trata de pertenecer a una comunidad de individuos que están abiertos a intercambiar ideas, proyectos, conocimiento y lo más importante, están dispuestos a colaborar.
Surge como una solución frente a la dificultad de operar “tú solo”. Se trata de una nueva manera de vivir el trabajo, en un espacio que ofrece la posibilidad de tener un lugar para crecer y al mismo tiempo formar parte de una comunidad profesional.
La iniciativa, que nació en 2009 de la mano de Brad Neuberg, un desarrollador de la ciudad de San Francisco, EU, hoy cuenta con más de tres mil 500 espacios en el mundo. Y si bien en México apenas comienza a despegar, cada vez surgen más lugares destinados a este fin.
Decir y escuchar
- El coworking es sencillamente un trabajo en conjunto, que une en encuentros causales o previstos a quienes tienen algo que decir y quieren escuchar.
- En este sentido se proponen proyectos para aprender ilustración, desarrollo web, animación 3D; noche de presentación de proyectos y almuerzos de emprendedores, entre otros.
Beneficios del coworking
- El coworking permite finalmente a los freelancers dejar atrás sus oficinas en casa, conocer personas con los mismos intereses y la oportunidad de utilizar infraestructura moderna sin necesidad de hacer una gran inversión.
- Los emprendedores permanecen a salvo de plazos forzosos, depósitos y avales, entre otros.
- Confortables espacios de trabajo y una atmósfera que inspira la creatividad y el intercambio de ideas para una máxima productividad.
- Instalaciones de primera para llevar a cabo reuniones, recibir a clientes y organizar conferencias. Además de contar con un domicilio para tu negocio, entre muchas otras cosas más.
- Oportunidad para renovar tu agenda de contactos (networking), al pertenecer a una comunidad de profesionistas de múltiples disciplinas.
- Flexibilidad horaria y personalizar la utilización de los servicios que más se ajusten a las necesidades de cada profesional.
Centros coworking en Mérida
- Coworking “CloserMe”: calle 38 #502-F por 61 y 63 Centro, Barrio de Mejorada.
- “Nodo CoWork”: calle 53 # 534 entre 70 y 72 Centro, Barrio de Santiago.
Clubes y grupos de Emprendedores
- “Startups Drinsk”: reuniones mensuales en bares para intercambiar experiencias sobre emprendedurismo.
- “FUN”: encuentros mensuales en los que se comparten historias de fracasos de proyectos de negocio para acelerar el aprendizaje de los líderes.
- “Haz la lucha”: movimiento que propone talleres periódicos, conferencias y eventos que promueven el espíritu emprendedor.
- “Hackers and Founders Mérida”: Club formado por emprendedores que se reúnen para intercambiar ideas sobre tecnología. Grupo antecedente del centro Closerme.
- “Maker Mérida”: Grupo de jóvenes que se juntan para desarrollar proyectos sobre tecnología.
Fortalecen ecosistema empresarial
Asimismo, capitalizando las experiencias, los fracasos y casos de éxitos, clubes y grupos de emprendedores con diferentes formas de trabajo y giros, presentan una alternativa para ampliar redes de contacto y aprender de las historias de sus representantes.
Los “Hakers and founders Mérida”, miembros de “FUN”, “Start up drinks Mérida”, “Haz la lucha”; “Mérida Lean Startup Circle”, “Club de creadores de éxitos” y “Maker Mérida” desde sus trincheras ayudan al fortalecimiento del ecosistema empresarial para potenciar proyectos. Estas iniciativas son inspiradas en movimientos de emprendedurismo al nivel mundial y crean capítulos locales para su difusión.
El común denominador es el deseo de compartir el conocimiento obtenido a partir de experiencias positivas y negativas, que eventualmente llegan a convertirse en un caso de éxito y trascender. Una de las bases de estos encuentros es el networking, es decir procurar, mantener y cultivar contactos valiosos para el proyecto en cuestión.
Con estas premisas se realizan en la ciudad las reuniones del grupo “Startups drinks”, que se realizan sin agenda o protocolos formales; una iniciativa de la comunidad emprendedora organizada por “Endeavor Mérida”. Se desarrolla en diferentes estados de México.
Otra alternativa la presentan los jóvenes Israel Cauich Viñas, Daniel Pardiñaz y Amir Oswaldo Canto Palomo, se trata de “FUN” (Fuck up nights), quienes en sus encuentros promueven una visión real de lo que es ser emprendedor, “que no siempre a la primera se logra formar una empresa”. En esta iniciativa se aprenden más que del éxito, del fracaso.
Por su parte, “Mérida Lean Startup Circle” es el grupo local para la gente apasionada que está interesada en la metodología Lean Startup, emprendurismo y generación de modelo de negocios, entre otros.
Para este fin difunden una variedad de formatos para aprender unos de otros. Bajo este esquema operan Carlos Navarro y Alejandro Cortés, fundadores del movimiento “Haz la lucha”, a través de la cual ofrecen charlas, eventos y talleres de formación para consolidar una cultura emprendedora.
Ruth Evergenyi, por su parte, lidera al “Club Oficial de Creadores de Éxito Mérida”, en consonancia con los grupos homólogos que laboran en diferentes países por el mismo fin: despertar la mentalidad de abundancia en emprendedores, empresarios y público en general, con herramientas y metodologías para el manejo de finanzas personales y empresariales sanas.
“Hackers and founders Mérida”, promovido por Luis Adolfo Cabrera Mandujado e Israel Arturo Domínguez se reúnen mensualmente para crear una comunidad colaborativa global de fundadores de startups.
En tanto el movimiento “Maker Mérida” es impulsado por Mario Javier Hevia Villajuana, Rodrigo Méndez Gamboa y José Ramón Bracamonte Barahona, quienes buscan generar eventos en los que se desarrollen proyectos de tecnología.
Entrada libre
- La mayoría de las reuniones de estos grupos son de entrada libre y sólo cuando incluyen capacitación se cobra una cuota de recuperación.
Ven gran potencial en la niñez
Por otro lado, luego de detectar que los programas de emprendedurismo no atendían al sector infantil y basados en los estudios que destacan el valor creativo de los niños en edad escolar, los académicos José Antonio Herrera Alamillo e Israel Imán Baquedano desarrollan el proyecto “Generando emprendores”, con el fin de sembrar el espíritu innovador y de propuestas de ideas en la infancia, que solucionen problemas de la sociedad.
Los también directivos de Ia organización Impulsora de Innovación, Nuevas Tecnologías y Desarrollo Sustentable (Innted), un despacho de consultoría y capacitación empresarial, proponen una metodología de formación a través de etapas que completan un ciclo, el cual inicia desde niños de 8 años. La primera que implementarán es “Wake up kids” (despierten niños, en inglés) y las siguientes están enfocadas a los adolescentes, universitarios y profesionales.
Esta propuesta incluye una metodología en dos vías: a través de la capacitación y una plataforma multimedia y de un pago de la licencia, con la que los interesados podrán adquirir el software o tener los talleres en sus centros de educación.
Israel Imán destacó que esta propuesta está dirigida a las escuelas públicas, instituciones privadas, gobiernos y el sector privado, ya que su iniciativa atiende etapas por edades y perfiles adaptables.
Reveló que proyectan que el modelo se replique al nivel nacional y Latinoamérica. Actualmente ofrecen talleres y pláticas para niños, al tiempo que desarrollan la plataforma luego de aplicar al programa Prosoft, un esquema de apoyo de la Secretaría de Economía (SE) para impulsar proyectos de software.
Metodología
- Académicos indican que su metodología se encuentra en proceso de registro ante el Instituto Nacional de Derechos de Autor y armando los prototipos de evaluación.