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MÉRIDA, Yuc.- El alto índice de inseguridad y el predominio de la delincuencia y el vandalismo en Seyé, ubicado a 29 kilómetros de la capital yucateca, propiciaron que anteanoche decenas de habitantes intentarán hacer justicia por cuenta propia. Incluso que quisieran “linchar” a los policías municipales en una trifulca que generó pánico entre la población.

Tras la lesión de un joven de 24 años de edad por parte de una banda de delincuentes conocidos como “Los Veintes”, los habitantes se levantaron en protesta para presionar a los policías municipales sobre la detención de los responsables.

Los hechos ocurrieron alrededor de las diez de la noche del pasado domingo, cuando Edgar C. G. fue interceptado por un grupo de vándalos que le provocaron una herida en el brazo con un arma punzocortante.

Esto generó que familiares y vecinos de esa población se manifestaran en las oficinas de la policía municipal, donde los inconformes exigieron justicia y un cese a los altos índices de vandalismo que aquejan a los habitantes.

Molestos por la incidencia de este tipo de delitos, un grupo de vecinos intentó ingresar por la fuerza a la cárcel municipal, donde elementos de la policía estatal custodiaban a los presuntos delincuentes.

“Nosotros venimos para hacer justicia, no podemos permitir que se sigan presentando atropellos como éste, por parte de un grupo de vándalos que nunca son castigados”, indicaron los quejosos.

Ante decenas de personas reunidas, los vecinos amenazaron con “linchar” a los delincuentes así como a los policías municipales si estos no ponen un alto a la ola de robos y asaltos a mano armada a los que están expuestos los habitantes del lugar.

Elementos de la policía estatal tuvieron que intervenir para tranquilizar a los habitantes, en lo que los familiares de Edgar se alistaban para acudir hasta la Fiscalía General del Estado (FGE), donde interpusieron su denuncia.

“Si no tenemos ley aquí en nuestro pueblo, tendremos que ponerla nosotros mismos, solo así podremos vivir tranquilos, ya no podemos permitir que nuestros hijos se sigan exponiendo a tanta inseguridad”, expresaron los vecinos.

Al respecto, el alcalde Pedro Pablo Paredes Pereira dijo que por los altos índices de vandalismo a los que están expuestos, se ha solicitado la intervención de la policía estatal para mayor seguridad.