Joven artista une el arte y los negocios en piezas únicas

Víctor Gómez Esquivel desarrolla una línea de artículos de decoración y una marca inspirada en el estilo yucateco mexicano.

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Las piezas diseñadas por Víctor Gómez Esquivel están disponibles en galerías y tiendas departamentales. (Milenio Novedades)
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Cecilia Ricárdez/SIPSE
MÉRIDA, Yucatán.- Víctor Gómez Esquivel, diseñador gráfico y artista visual, egresado de la Universidad Anáhuac Mayab, con estudios especializados en España y Chile, capitalizó su talento para hacer el arte sustentable logrando un equilibrio con el interiorismo. 

De esa manera fundó un negocio de artículos  de decoración y una marca inspirada en el estilo yucateco y mexicano, cuyas piezas se distribuyen en exposiciones nacionales. 

Consciente de la dificultad que implica vivir únicamente del arte, reenfocó su proyecto y sin abandonar su labor expresiva, ahora desarrolla propuestas que pueden estar en galerías y tiendas departamentales especializadas.

Su tienda llamada Casa 228 se desarrolla desde Campeche y su marca de piezas de decoración Maison Báanal, con sede en Conkal, comercializa en el país y próximamente en Sudamérica. 

¿Por qué elegiste al arte como proyecto de vida y de negocio?

Desde que decidí que quería vivir del arte empecé a experimentar desde diferentes disciplinas; aunque hay maneras más libres para expresar el lenguaje, no es tan fácil para verlo como un negocio, pero en el proceso de encontrar una forma que fuera sustentable para trabajar como artista decidí crear una marca de decoración con ediciones limitadas y material de calidad, que se pudieran vender por internet, exposiciones de interiorismo y decoración, como ya lo hacemos en Puebla, Guadalajara, la Ciudad de México, Querétaro y la Península de Yucatán en puntos de venta. En fin, que fuera una pieza decorativa que tuviera además un trabajo artístico detrás.

Proyecto que trabajamos Jonás Espinosa Ojeda y yo desde hace cuatro años, desde que lo pensamos, maduramos la idea, trabajé en otros lugares, ahorré dinero y lanzamos la marca en la Expo Hábitat en el World Trade Center de la Ciudad de México.

¿Cuál consideras que es la ventaja competitiva respecto a otros negocios del mismo giro?

Logramos que el sitio donde vivas no sólo sea un lugar bonito, sino que cuente historias, que no se limiten a lo personal, que sea un área que se disfrute, que refleje la personalidad y sea un espacio funcional.

"Tener paciencia es la regla número uno. Trabajo viviendo tranquilo, haciendo lo que me agrada y adaptándome a las opiniones de la gente", dijo Víctor Gómez 

También en esta labor hay una combinación de mano de obra peninsular y mexicana, porque colaboran maestros artesanos del Estado y de otras partes de la República, que se suman a mi trabajo como artista. La decoración de interiores me ayudó a encontrar un equilibrio.

Hay un estilo marcado, pero armamos una colección como un viaje que parte desde Mérida hasta la Ciudad de México, como el sureste, inspirada en la vegetación, la fauna, los pisos de pasta, y terminamos hasta el graffiti como una mirada conectada con el pasado y lo contemporáneo. De esta manera cada temporada presentaremos propuestas nuevas, que estarán disponibles por periodos.

¿Cómo se encuentra tu trabajo en cuanto al marco legal?

Todo está registrado, mi marca ante el Instituto Mexicano de la Propiedad Intelectual y mis trabajos ante Instituto Nacional del Derecho de Autor, tengo una abogada muy buena que me maneja todo el tema. Además tomé cursos al respecto y también en cuanto a lo fiscal. En el equipo hay un excelente administrador que cuida todos los detalles económicos y en los cuales también estoy involucrado, aunque me da muchos dolores de cabeza. Como artistas y diseñadores debemos conocer nuestros derechos y capacitarnos para entender las leyes también. 

¿Cuáles son los siguientes pasos?

Quiero  seguir consolidando mi tienda en Campeche, Casa 228, que tiene dos años, y mi marca Maison Báanal que básicamente es una galería, quiero que se convierta en un showroom de diseño especializado, para esto el próximo 19 de septiembre, como parte del proyecto Area Showroom, con las piezas que manejo voy a vestir cada zona de una casa del fraccionamiento Residencial Altabrisa, para que la gente conozca cómo lucen en el hogar y adquieran cualquiera que les guste y esté expuesta en el sitio, bajo el concepto de la reinterpretación del arte yucateco. Cada dos meses cambiaría la temática, la primera es de otoño y la siguiente será de invierno, en el mismo fraccionamiento pero en otra casa.

Este esfuerzo es coordinado con el equipo de ADW que además lanzará una revista relacionada con el interiorismo.  A finales de año viajaré a Chile para vender ahí y lo mismo buscaré en Colombia. 

¿Cómo joven como fue tu proceso de emprendimiento?

Fue difícil al principio, pero estudiar y trabajar fuera de México me sirvió para ampliar mi panorama, confirmar que sí se puede vivir de lo que amo hacer, regresé más seguro de mi trabajo y decidí organizar todo, planear los pasos ya no en ideas desordenadas, ahora pienso hasta en la logística de traslado de las piezas.

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