Jaime Tetzpa/SIPSE
MÉRIDA, Yuc.- Roberto Ruarte Villaverde, especialista en economía, subrayó que México será en 2015 un país fértil para las inversiones bursátiles debido a las reformas estructurales, ya que se propiciará un ambiente favorable, por lo que hizo un llamado a los empresarios yucatecos para despertar el interés de capitales extranjeros que podrían apostar a la consolidación de algunas compañías.

Explicó que en este momento las reformas han provocado desajustes en muchos sectores económicos, pero una vez que se normalice la situación se verán los resultados positivos. El conferencista habló sobre las inversiones en la bolsa de valores, en el marco del congreso del IMEF universitario, que concluye hoy. 

Ante un auditorio de 800 asistentes al XVI Congreso Nacional del Instituto Mexicano de Ejecutivos de Finanzas (IMEF) Universitario, denominado “Transforma: renovando ideas, sumando líderes”, el analista dijo que su exposición giró en torno a cómo se mueve el mercado bursátil, ya que en el largo plazo es un gran negocio para las inversiones, pero hay que tener cuidado para hacerlo en el momento adecuado.

“Esto se debe a que por lo general, cuando en el mercado hay muy buenas noticias, es el momento de venta y cuando las noticias son malas es el momento de la compra, pero en lo general, en el largo plazo el mercado siempre se recupera y deja muy buenos rendimientos. En el caso de México está avalado y creemos que habrá importantes oportunidades”, comentó.

Agregó que las reformas estructurales abren un nicho importante, por lo que se puede prever que la Bolsa Mexicana de Valores y las acciones serán muy atractivas, sobre todo para los inversionistas extranjeros a partir del próximo año.

“Los inversionistas bursátiles propician la generación de riqueza y la gente comienza a comprar casas, carros, propiedades; los bancos bajan intereses y comienzan a dar créditos a tasas muy accesibles, luego la gente invierte en acciones más altas y ahí es donde se pueden presentar las crisis”, señaló.

Como ejemplo puso las crisis de España y Estados Unidos en 2008, las cuales se dieron porque el mercado bursátil creció y bajaron las tasas de interés, lo que motivó a la gente a tomar créditos y comprar propiedades que se reevaluaron.