Mató a sangre fría a una mujer y amaneció en la cama tibia de otra

La causa penal indica que el chofer aprovechó que la septuagenaria se quedó sola con él, para asaltarla y asesinarla.

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En el cateo, que se realizó en casa del chofer en Kinchil, se encontró parte del botín que obtuvo el ahora acusado. (Milenio Novedades)
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Luis Fuente/Milenio Novedades
MÉRIDA, Yucatán.- Juan L. M. se negó a declarar ante el Juzgado de Control de Kanasín, instancia que le imputó el delito de homicidio calificado por el asesinato de la fotógrafa canadiense Bárbara McClatchie Andrews.

El cuerpo de la mujer, de 74 años de edad, fue hallado la mañana del pasado viernes 30 de septiembre, entre la maleza a la altura de la Hacienda Teya, en la carretera Mérida-Valladolid.

El juez de control Santos Alfredo May Tinal calificó de legal la detención de este hombre, le imputó el delito de homicidio calificado y le decretó la prisión preventiva, medida que estará vigente cuando menos hasta el próximo día 7 cuando se lleve a cabo la audiencia para resolver su situación jurídica.

Como publicamos, el domingo en la noche, Juan Carlos L. M. fue detenido por agentes de la Policía Estatal Investigadora en cumplimiento de una orden de aprehensión expedida por el juzgado de control de Kanasín por su participación en el homicidio de la fotógrafa extranjera avecindada en Mérida desde hacía más de una década.

En la audiencia celebrada ayer en el Centro de Justicia Oral de Kanasín, el imputado -asesorado por su abogado defensor-, se reservó el derecho de rendir su declaración sobre los hechos que se le imputan, tal y como lo prevé el sistema acusatoria oral.

Bárbara McClatchie abordó una camioneta Van del ADO desde Cancún para viajar a Mérida

La causa penal indica que los hechos sucedieron en la madrugada del 30 de septiembre pasado, cuando la extranjera llegó a Cancún procedente de su país y en el aeropuerto de ese polo turístico abordó, junto con otros pasajeros, una camioneta Van del ADO para viajar a Mérida, lugar donde residía actualmente.

En el trayecto a la capital yucateca, los demás pasajeros se quedaron en Valladolid, y la extranjera se quedó sola con el chofer, un exmilitar de nombre Juan L. M., quien se percató de que la extranjera llevaba un equipo fotográfico costoso, así como una buena cantidad de dólares americanos.

En algún punto del camino y aprovechando que ya era de noche, este hombre detuvo el vehículo y asaltó a la pasajera, quien opuso resistencia, pero la venció la superioridad física y juventud del chofer, quien con la correa de la cámara terminó por estrangular a su víctima.

Luego Juan continuó el trayecto a Mérida, pero a la altura del kilómetro 14 –cerca de la hacienda Teya- se deshizo del cadáver de la extranjera porque estaba por llegar al puesto de control de la Secretaría de Seguridad Pública, donde pasó sin problemas y llegó hasta Kinchil, donde vive con su esposa.

El cuerpo de la extranjera fue encontrado en la mañana del día 30 por un campesino que iba a leñar, por lo que al principio se presumió que la mujer había sido atropellada, pero la autopsia determinó que se trató de un asesinato.

Las investigaciones llevaron al arresto del hombre, así como la realización de un cateo en el domicilio del acusado, en Kinchil, donde se encontró parte del botín que obtuvo el ahora imputado.

Por cierto, ayer se realizó una marcha de protesta por parte de la comunidad de fotógrafos y artistas por el crimen de Bárbara McClatchie Andrews.

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