Ana Hernández/SIPSE
MÉRIDA, Yuc.- Personal de la Dirección de Inspección y Vigilancia de la subdelegación de Pesca de la Sagarpa revisa las congeladoras que declararon su inventario de pesca de pepino de mar de la temporada que recién terminó.

El subdelegado de Pesca en Yucatán, Ernesto Martínez Ordaz, indicó que están en la etapa de monitoreo y verificación permanente que se aplica cada vez que concluye la temporada de pesca de alguna especie, esta vez fue de pepino de mar, pero también con la de langosta y pulpo.

“Cuando termina la temporada de captura de las especies y entran en veda, los permisionarios tienen 72 horas para hacer sus inventarios e indicar a las oficinas de Pesca cuántas toneladas del producto tienen en resguardo para su comercialización, y el personal de la Dirección de Inspección y Vigilancia acude a las bodegas para verificar esa información.

Ayer, el personal de la Secretaría de Agricultura, Ganadería, Desarrollo Rural, Pesca y Alimentación (Sagarpa) utilizó al menos tres camionetas en sus recorridos por congeladoras del puerto de Progreso; iban acompañado de elementos de la Marina Armada de México.

Sobre este apoyo militar, Martínez Ordaz señaló que es un respaldo normal que en especial se da cuando la Semar lo considera y según el volumen del producto que deberán verificar, algunos manifiestan poco y otros varias toneladas.

“La revisión se aplica a todas las congeladoras a las que manifestaron tener pepino así como a las que no, y en el caso de estas últimas, si tienen y no manifestaron, se les decomisa el producto, nosotros actuamos primero de buena fe, verificamos la cantidad que dicen tener”, destacó.

En esta última temporada se reportó la captura de mil 616 toneladas de pepino de mar en estado fresco, fueron capturadas durante los días de temporada que abrió la Comisión Nacional de Acuacultura y Pesca (Conapesca) en el Estado.

Para la captura de pepino de mar que se autorizó del 10 al 19 de junio, se otorgaron 195 permisos que ampararon 590 embarcaciones con un promedio de cuatro tripulantes cada una, por lo que al menos en ese lapso, 2,360 personas de dedicaron a la pesca del equinodermo.