Ordene, pague y coma; en este restaurante no hay meseros

El restaurante permite que la orden sea ingresada mediante una aplicación que el cliente puede descargar en su teléfono celular.

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Los restaurantes de la cadena Eatsa, que ofrecen un servicio automatizado, se están multiplicando en Estados Unidos. (Notimex)
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Agencias
NUEVA YORK, USA.- La cadena de restaurantes Eatsa, concebidos  como un sistema de entrega de alimentos totalmente automatizados en que el cliente no interactúa nunca con otro ser humano, se está multiplicando en Estados Unidos.

La ciudad de Nueva York recientemente vio la apertura de dos de estos establecimiento, inaugurados hace dos años en la ciudad de San Francisco, y que ya se han expandido también a Berkeley y Washington DC.

Lo que ofrece esta cadena de restaurantes son ensaladas basadas en la quinoa, un “seudo cereal” originario de Sudamérica que contiene altos valores proteínicos, que los clientes ordenan, obtienen y consumen sin interactuar jamás con otro ser humano.

De acuerdo con Notimex, los clientes tienen la opción de escoger entre unas 10 variedades de tazones que contienen hasta 29 gramos de proteína con un costo por debajo de los siete dólares, sin impuestos, lo que constituye una oferta muy competitiva en ciudades como Nueva York.

El restaurante permite que la orden sea ingresada mediante una aplicación que el cliente puede descargar en su teléfono celular y puede hacer de manera remota, o mediante la serie de pantallas sensible al tacto colocadas en los restaurantes.

Una vez colocada la orden, el nombre de cliente, tomado de la tarjeta de crédito mediante la que se realiza el pago, aparece en un panel que indicará en qué  compartimiento aparecerá el pedido tras dos o tres minutos de espera.

Los clientes pueden comer de pie apoyados en unas barras situadas a los lados del establecimiento, que no tiene mesas y que cuenta apenas con una media docena de sillas, o puede guardar la ensalada en una bolsa para llevar.

Las personas que prepararan los alimentos no se ven. Un solo empleado del establecimiento se encuentra presenta en el local a fin de aclarar dudas sobre el proceso.

Durante la hora del almuerzo, largas filas se concentran fuera del restaurante, pese a que el establecimiento de la tercera avenida de Manhattan abriera apenas hace unas semanas.

Para David Friedberg, uno de los fundadores, la empresa es más que un restaurante y lo define como “un sistema de entrega de alimentos”, de acuerdo con una entrevista que ofreció al diario The New York Times.

La eficiencia, de acuerdo con Friedberg, comenzó desde que él y sus socios seleccionaran a la quinoa como base de sus alimentos, debido a que este ingrediente representa “una manera mucho más eficiente que la carne para proveer proteína a las personas”.

“Con el tiempo, el objetivo es automatizar cada vez más el proceso para aumentar la velocidad y reducir los costos, a fin de crear un producto alimenticio mucho más barato y también más saludable”, afirmó Friedberg.

Byron Melo, colombiano con tres décadas en Estados Unidos, se ha convertido en un asiduo de esta restaurante por el sabor de las ensaladas, por el conveniente precio y por el tamaño de las porciones. No obstante, descarta que este experimento pueda ser el futuro de los comedores en el mundo.

“¿El futuro de los restaurantes? No creo, porque la cultura aún no se presta para eso, pero creo que este sitio tiene muy buena acogida, y por lo que me doy cuenta a la gente le gusta la idea”, afirmó Melo, quien es paramédico de profesión.

En entrevista con Notimex, Melo expresó que ha recomendado a sus conocidos el restaurante, pese a que su primera reacción cuando entró a la empresa fue la sorpresa.

“Yo creo que mucha gente tiene la misma reacción. Entre y miran y dicen: ¿y esto qué es?”, aseguró el paramédico.

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