Pónganse a temblar: sismos no se miden por grados ni en escala Richter

Desde hace varios años, en Estados Unidos se utiliza 'magnitud de momento'; los temblores no se miden por grados.

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En Estados Unidos, el USGS recomienda no utilizar 'grados' para expresar la magnitud de un sismo, porque en realidad las escalas de magnitud sísmica no tienen grados sino que son abiertas: no tienen límite. (Imagen de contexto/excelsior.com.mx)
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Agencias
MÉXICO, DF.- El sismo registrado esta mañana en los límites de Veracruz y Oaxaca tuvo una magnitud de 6.4… y no, no en la “escala de Richter”, que desde hace décadas no se utiliza.

Pero, ¿es la escala de Richter obsoleta? No precisamente: simplemente se utiliza para otro tipo de sismos, los que son pequeños y ocurren generalmente en el sur de California. La mayoría de los sismos grandes ahora se miden con la escala de magnitud de momento (Mw).

Aunque se escucha rimbombante "escala abierta de Richter" -por aquello de que existen "escalas cerradas", como la de Mercalli o la japonesa, que tienen un límite máximo-, quienes utilizan dicho término incurren en un error.

Tampoco es correcto decir que un sismo tuvo una magnitud de 6.2 grados. Las escalas de magnitud sísmica no son escalas graduada, precisamente porque es una escala abierta y no tiene un límite. Las escalas graduadas o cerradas son en las que se eligen dos puntos y se dividen en partes iguales.

La escala de Richer fue desarrollada por el sismólogo Charles Richter en la década de 1930 para evaluar el tamaño de los sismos. Richter, que trabajó en el sur de California, creó un método para calcular dónde comenzó un sismo o su epicentro así como su magnitud.

La escala de Richter se creó bajo las condiciones sísmicas de California, aunque más tarde se adaptó a otras regiones

La escala de Richter funciona de manera logarítmica: un sismo de magnitud ocho libera 32 veces más energía que uno de siete, y un millón de veces más energía que uno de cuatro.

Sin embargo, esa escala siempre tuvo sus limitaciones. Por ejemplo, fue creada para comparar el tamaño de un sismo con el tamaño de otro.

Los científicos, sin embargo, querían medir un sismo no sólo en términos comparativos sino en términos absolutos y saber cuánta energía se liberaba cuando ocurría una ruptura.

Además, la escala de Richter o escala de magnitud local fue ideada en las condiciones sísmicas de California.

Aunque se adaptó para medir sismos en otras partes del mundo, el hecho de que el suelo de California no se desplace igual que el suelo de Guerrero, representa otra limitante.

Con la llegada de equipo sismológico moderno en la década de 1970, los científicos comenzaron a determinar el área donde la falla hacía ruptura, así como qué tanta energía se liberaba, algo llamado “el momento sísmico”.

Debido a que la escala de Richter era entendida muy fácilmente por la prensa y la gente, los científicos idearon la forma de convertir la información del "momento sísmico" a una escala comparable a la de Richter, y fue así como surgió la “escala sísmica de magnitud de momento”.

En Estados Unidos, el Servicio Geológico de los Estados Unidos (USGS) ya no utiliza la escala de Richter para dar resultados confiables sobre sismos grandes, además de que dicha escala nunca fue designada para sismos ocurridos a una distancia de más de 600 kilómetros.

La magnitud de momento es la escala prioritaria utilizada por la agencia estadounidense, aunque también se pueden utilizar otras.

Por ello, el USGS suele recomendar sólo utilizar el término “magnitud” seguido por el número: sismo de magnitud 7.0, de magnitud 8.2, de magnitud 7.2, de magnitud 6.7.

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