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SANTIAGO, Chile.- La presidenta chilena Michelle Bachelet, quien entregará el poder el próximo domingo al mandatario electo Sebastián Piñera, anunció anoche en cadena nacional, que hoy enviará al Congreso Nacional un proyecto para una nueva Constitución política de la república.

“Se concreta así un paso muy importante para nuestro horizonte común. Porque es en la Constitución donde acordamos el país que queremos ser y la manera en que queremos vivir juntos”, dijo en su mensaje.

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De acuerdo con información de Notimex, indicó que de esta forma cumple el compromiso que asumió en su gobierno y enfatizó que “tenemos el deber de aspirar a más y no quedarnos con un cuerpo jurídico que no dice relación con nuestros tiempos y el futuro que todos queremos construir”.

Precisó que la actual Constitución, que data de 1980, en plena dictadura militar (1973-1990), y que fue modificada en forma profunda en 2005, durante el gobierno de Ricardo Lagos (2000-2006), es “ilegítima en su origen”.

Enfatizó que “el proyecto de Constitución que enviaré se hace cargo de las demandas ciudadanas por una sociedad más equitativa, donde la dignidad de todos está mejor protegida, una Constitución cuya finalidad es proporcionar un marco normativo legítimo, para que todos y todas las chilenas vivamos en paz”.

Expuso que el proyecto es "el fruto de un proceso participativo inaugurado en octubre de 2015, inédito en Chile y elogiado internacionalmente”.

En él, abundó, participaron “204 mil vecinos, colegas o amigos que dialogaron en encuentros y cabildos ciudadanos, y con 17 mil participantes en la Consulta Indígena Constituyente”.

Detalló que el proyecto de nueva Carta Magna “modifica sustancialmente la Constitución vigente, pero mantiene muchas de sus disposiciones, casi todas las introducidas en las reformas después de 1989 y muchas de las cuales provienen del texto de 1925”.

Adelantó que “esta nueva Constitución establece que Chile es un Estado de derecho democrático y social. En consecuencia, establece nuevos derechos y amplía, aclara, perfecciona y garantiza los derechos y garantías ya establecidos en el texto vigente”.

Además, establece el derecho a la personalidad, a la participación, a la información, a la vivienda, al trabajo y a la gratuidad en la educación, junto con ampliar el derecho a huelga, al ejercicio de los derechos políticos, el derecho a la libertad individual y a la seguridad personal, apuntó.

La mandataria resaltó que “esta Constitución se hace cargo de una deuda histórica: el reconocimiento constitucional de nuestros pueblos originarios, con sus derechos, su identidad y su cultura y su legítima aspiración de tener una representación en el Congreso Nacional”.