Ola de asesinatos de policías en Venezuela

En lo que va de este año han muerto a manos del hampa común 91 agentes, 61 de ellos al oponerse a ser despojado de su arma o la motocicleta que conducían.

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Agencias
CARACAS, Venezuela.- Una investigación exhaustiva en torno a la ola de asesinatos de policías en la ciudad de Caracas, para impedir la impunidad, exigió hoy el ex comisario policial Eugenio Rojas a la Fiscalía General de la República.

"El ataque armado contra funcionarios se ha vuelto cotidiano, al punto de que son tan vulnerables como el ciudadano común", precisó el ex director de la policía del Estado Miranda, limítrofe con la capital de Venezuela.

Rojas destacó que en lo que va de este año han muerto a manos del hampa común 91 agentes policiales, 61 de ellos al oponerse a ser despojado de su arma de reglamento o la motocicleta que conducían, y el resto falleció a tiros en otras circunstancias delictivas, según informa Notimex.

"Son pocos los crímenes de policías que han sido resueltos, o al menos, han tenido alguna reacción oficial, por lo que la Fiscalía General de la República debe ordenar una investigación al respecto", afirmó el comisario jubilado de la extinta Policía Técnica Judicial.

Señaló Rojas que las personas han perdido el respeto a los policías, y eso hace que cada día haya mayor confrontación entre las dos partes, y aunado a ello, existen elementos claves que hacen del funcionario una víctima tan o más vulnerable que un civil.

"Los antisociales necesitan pistolas y municiones para seguir delinquiendo. Esas armas las consiguen rápido a partir de los funcionarios policiales a quienes les dispararan a traición y una vez inertes, los despojan de su arma", señaló el analista.

Resaltó que otro factor ligado al aumento de los homicidios a los efectivos policiales tiene que ver con el "liderazgo" que obtienen los criminales con el delito.

"Hoy el llamado cartel no se obtiene con el número de asesinatos sino con la calidad de la persona fallecida. Por lo tanto el delincuente busca matar a personas connotadas, policías y escoltas, por lo que ahora nadie quiere dedicarse a esas actividades", dijo.

Rojas refirió que para los integrantes del hampa común, matar a un Guardia Nacional Bolivariano (GNB) es "ganar cartel en el barrio", es decir, se obtiene respeto ante los enemigos, porque fue capaz de asesinar a un funcionario de gran estatus.

Finalmente, estimó que el delito de homicidio podría seguirse incrementando porque no existe en Venezuela una política de seguridad pública coherente, ya que el problema se ha abordado atacando las consecuencias y no sus causas.

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