Agencias
CHICAGO, EU.- Un grupo de activistas comunitarios envió hoy una carta al gobernador Pat Quinn y al presidente del Senado, John Cullerton, rechazando la intención de otorgar solo un permiso de manejo para visitantes a los indocumentados y no una licencia regular.

Los activistas, encabezados por Carlos Arango, del Frente Unido pro Inmigrantes, aseguraron que la diferenciación en el documento "plantea un problema importante para el estado con respecto a una posible violación de los derechos civiles de todos los inmigrantes".

Señalaron la preocupación de los firmantes de la misiva por esta iniciativa, que promueve con entusiasmo la Coalición pro Derechos de los Inmigrantes y Refugiados (ICIRR), de emitir una licencia temporal de código de color diferenciado, similar a la que se otorga a visitantes, según publica Notimex.

"Esto expone a la población inmigrante a las prácticas discriminatorias y la discriminación racial. Sugerimos que se apruebe una legislación que de oportunidad a los indocumentados de obtener una licencia de conducir regular con el pasaporte de su país de origen y otra documentación de residencia en Illinois", agregaron en el documento.

La carta fue enviada a nombre de "la población latina inmigrante que reside en el estado y que ha experimentado una historia de discriminación racial por el color de la piel y estatus migratorio".

Los activistas felicitaron a ambos políticos por su iniciativa para abordar el tema de acceso de los indocumentados a una licencia de manejar e impulsar una propuesta de ley, pero advirtieron de futuras consecuencias si solo queda en un permiso diferenciado.

"En Tennessee, donde se aprobó una ley similar en 2004, la medida condujo a un aumento de la discriminación contra los inmigrantes, creó una carga adicional para las agencias de aplicación de la ley y ha aumentado el número de conductores sin seguro", argumentaron.

Destacaron que el mensaje enviado por la comunidad latina durante las eleccciones del pasado 6 de noviembre obliga a considerar "una licencia completa, regular, para todos los conductores que no pueden contar con documentación migratoria".

Los inconformes invitaron a resolver este asunto durante la sesión de veto que está vigente, ya que "esto no es sólo una buena política, sino que responde a una realidad que dentro de los próximos cuatro años, deberá conducir a que la reforma migratoria se convierta en una ley federal".

El origen de la inconformidad se debe a que la iniciativa que se promueve contempla el acceso de los indocumentados a un permiso temporal de color morado, similar al que se otorga a estudiantes, familias de trabajadores legales temporales y otros visitantes.

Esto, en lugar de la licencia de conducir regular que es de color rojo y para todos los residentes.

En tanto, ICIRR, que encabeza la formada Coalición de Carreteras Seguras, lleva a cabo desde el martes una actividad de apoyo a la medida en Springfield, capital de Illinois, en espera de la presentación de la propuesta legislativa en la sesión de veto que se interrumpe este jueves y reanuda el 4 de diciembre durante tres días.