Sacerdote compra a un niño por 25 dólares

Hace 20 años, un sacerdote 'compró' a Manuel, un jovencito que había sido vendido por sus padres a un red de traficantes de órganos.

|
El cura Doñoro trabaja en el Hogar de Nazaret donde rescatan a niños abandonados. (hogarnazaret.es)
Compartir noticia en twitter
Compartir noticia en facebook
Compartir noticia por whatsapp
Compartir noticia por Telegram
Compartir noticia en twitter
Compartir noticia en facebook
Compartir noticia por whatsapp
Compartir noticia por Telegram

Agencias
LONDRES, Inglaterra.- Como nunca antes, actualmente la figura del sacerdote ha sido duramente cuestionada y expuesta, ya sea por la vida ostentosa de algunos o, peor aún, por otros que han cometido actos indebidos en contra de menores. Sin embargo, también los hay quienes hacen de su ministerio una vía para ayudar al prójimo y, sobre todo a los niños, como el de la siguiente historia que recopiló el sitio web actualidad.rt.

Hace veinte años, el sacerdote Doñoro salvó a un niño al que iban a vender por 25 dólares. Desde entonces, no cesó en su lucha contra el tráfico de órganos en el Amazonas. La historia del padre Ignacio María Doñoro, quien fue capellán militar de la Guardia Civil de Intxaurrondo, País Vasco, empezó hace 20 años, según publica El País

En aquella ocasión, le dieron 20 mil dólares para ayudar a los niños de El Salvador. En el país centroamericano le conmocionó mucho la historia de un niño que iba a ser vendido por sus padres para el tráfico de órganos. 

"Tenían cuatro hijas, el chico tenía una parálisis y habían decidido venderlo a un grupo de traficantes", explica.

Según cuenta, una noche se le apareció un pequeño con una mirada tierna, y al querer saber más del menor consultó a las monjas.

Diez años después de salvar a Manuel, este le escribió para agradecerle que lo hubiera rescatado de los traficantes

Ellas le dijeron que sus padres lo habían vendido para el tráfico de órganos y lo iban a matar. Al sentir la impotencia de la suerte del menor, quien tenía parálisis, decidió comprarlo. 

“Fuimos al monte a buscar a los traficantes, les pregunté cuánto valía el chaval. Creía que habían dicho 25 mil dólares; resultó que habían dicho 25 dólares, 25 dólares valía su vida”.

Doñoro decidió comprar al niño con el dinero que disponía. Este se llamaba Manuel y tenía 14 años.

El cura se hizo pasar por traficante de órganos, “agarré al niño por la camiseta, lo metí en la camioneta. Manuel, tenía 14 años, se orinó de miedo. Lo abracé. ‘Manuel’, le dije, ‘yo estoy dispuesto a dar mi vida por ti’. Cuando terminaron de auscultarlo me miró con tanta ternura que sentí que me miraba Dios”.

Desde entonces, el padre ha salvado en el Amazonas a miles de niños, "se los he arrebatado a la maldad humana, donde todo vale y ya no importa nada". 

Ahora, a través de su organización Hogar Nazaret, desarrolla la vocación que le despertó el conocimiento de la historia de Manuel. 

"Después del tráfico de drogas y de armas, el tráfico de niños es el que más abunda… Donde estoy ahora, en Puerto Maldonado, Perú, hay interés de las autoridades por impedir este abuso, pero las bandas de traficantes son muy fuertes", dice.

Diez años después de salvar a Manuel, este le escribió para agradecerle que lo hubiera rescatado de los traficantes. "No hacía falta su gratitud. Su sonrisa ya me había salvado a mí la vida. Gracias a él", respondió Doñoro.

Lo más leído

skeleton





skeleton