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MÉRIDA, Yucatán.- En Mérida, una de cada tres personas utiliza los servicios de los distribuidores automotrices autorizados mientras la garantía de su auto está vigente; posteriormente, lo lleva a talleres, debido al menor costo que representa.

Para evitar afectaciones a su vehículo y en apoyo de su economía, las autoridades sugieren diversas medidas de eficiencia.

Una vez que ha decidido qué auto adquirir, si lo pagará al contado o con financiamiento, y tras asimilar el gasto mensual que debe hacer en gasolina, aditivos y el seguro con cobertura amplia o de daños a terceros, todo dueño de un vehículo se enfrenta a un dilema más: llevarlo a servicio y reparación a la agencia autorizada o a un taller particular.

De acuerdo con un estudio realizado por la consultora de venta automotriz al menudeo J.D. Power, en promedio un cliente gasta 440 pesos más por llevar su auto a la agencia y 22 por ciento de los usuarios mencionó haber hecho un gasto más alto de lo que esperaba. 

Los resultados de este trabajo fueron obtenidos a través de cinco mil encuestados, propietarios de autos, de entre uno a tres años.

Dentro de los factores que consideraron más importantes al momento de llevar su vehículo con la marca, destacan la calidad del servicio 31 por ciento, proceso de entrega 22 por ciento, el inicio de la visita a la agencia 18 por ciento, las instalaciones 15 por ciento y la atención del asesor 14 por ciento.

Los malos tratos, el incumplimiento de los tiempos de entrega, una atención poco personalizada, así como los elevados costos que caracterizan a los distribuidores de las marcas han llevado a que 48 por ciento de los clientes no regrese a hacer la reparación de sus coches a las agencias y prefieran acudir a talleres privados.

Sin embargo, el acudir por servicios a un taller mecánico privado genera en ocasiones gastos más altos de los que en una agencia, donde en ocasiones se paga por el servicio casi el doble. 

En un taller se cobra más económico, pero –según usuarios- es casi seguro que regresarán porque el auto “tiene otro desperfecto”, aunque no en todos los negocios traten de esa forma al cliente.

“Es una discusión en cuanto a la intuición de las personas. No podemos asegurar que tal o cual taller le está ‘robando’ al cliente, pero sí aconsejamos tomar las medidas precautorias para conocer si el servicio que se le proporciona es el indicado, como una verificación del lugar, ya sea el taller o la agencia, pues deben contar con la lista de precios a la vista del público”, explicó el delegado de la Profeco, José Antonio Nevárez Cervera.

Daniela Martínez Ramírez, una de las consultadas, explicó que lleva su Mazda 2010 a un servicio particular. “El servicio es mejor, más económico y más seguro; en tres años de garantía lo llevé al taller autorizado y nunca le cambiaron las bujías ni los filtros, y ahora no gasto lo que me cobrarían en la agencia, aun cuando se compran refacciones originales”.

Las garantías en vehículos nuevos en México tienen una cobertura de tres años o 60 mil kilómetros; pero hay diferencias al hacer un servicio como la afinación.