‘A este edificio le doy las gracias por todo lo que nos dio’ (video)
El Hospital General sufrió de muchas carencias y necesidades.
Teresa Pérez/SIPSE
CANCÚN, Q. Roo.- La corrupción y falta de voluntad política dejaron en el olvido y a su suerte al Hospital General “Jesús Kumate Rodríguez” que por muchos años y con todas las necesidades de atención médica en Cancún, fue adecuándose conforme al crecimiento poblacional, pero en poco tiempo fue rebasado hasta convertirse en un hospital de guerra del destino turístico más solicitado a nivel internacional.
Sin embargo, con todas las carencias y necesidades, con catres a medio uso, petates para resolver el tema de espacios entre los pasillos hacinados por los pacientes, con la falta de equipo médico para atender especialidades, el desabasto de medicamentos, aún así por más de tres décadas mantuvieron el lema de “cero rechazo” y como aliados un grupo de médicos y enfermeras que pese a las condiciones precarias del nosocomio lucharon por salvar vidas.
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María Cecilia Bracho Azamar, con 24 años de servicio en el Jesús Kumate Rodríguez, comentó que a su llegada a este hospital nunca pensó encontrarse un bunker de guerra, pues la imagen que recuerda es la de un centro de salud adaptado al servicio de un hospital con 90 camas de hospital, “esta imagen chocaba mucho con el nivel de Cancún como destino turístico”, contó.
Hemos pasado muchas necesidades y poco a poco se han ido aumentando áreas y también reconocimientos como la acreditación de la UCIN pediátrico, dijo Brazo Azamar.
La falta de personal es un tema que siempre ha sido el talón de Aquiles del nosocomio, pues no han abierto plazas para ofertar más especialidades tan necesarias para la atención de pacientes.
“A este edificio le doy las gracias por todo lo que nos dio y todo lo que nos enseñó, ha sido una experiencia muy padre, este ha sido mi casa…, a pesar de todas las carencias como personal aprendimos a trabajar con lo que teníamos, ahora con el nuevo hospital estoy contenta, lo veo como una necesidad que teníamos pendiente porque las autoridades tardaron mucho y hoy nos queda un compromiso grande de mejorar el servicio”, expresó.
A mi llegada a esta ciudad y a este hospital apenas habíamos un grupo pequeño de médicos que dábamos servicio, el resto era de urgencia y lo teníamos que buscar a domicilio con ambulancia, hoy en día contamos con tres turnos y con más demanda de asistencia médica.
“En los 90’s la demanda creció de ser un hospital de 30 camas pasó a 90, ya en el año 2000 se pasó a 120 camas de hospital y desde hace 18 años se convirtió en un hospital escuela con diferentes especialidades”, explicó Aurelio Espinosa Rojas, subdirector médico.
De acuerdo con médicos que iniciaron con el proyecto del Jesús Kumate Rodríguez, desde el inicio todo fue mal, pues el edificio que se había sido construido para la Secretaría de Salud, al final se vendió al Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) gineco-4 ,dejando desprotegidos de un servicio de calidad a quienes no contaban con servicio médico.
De acuerdo con Francisco Javier Alvarado, pediatra del hospital General, este nosocomio tuvo más de cinco gobernadores, la mayoría indiferentes por la salud de la comunidad, “desde Villanueva hasta la fecha hemos esperado un hospital digno para nuestros pacientes, pero hasta ahora no se ha podido inaugurar el edificio que por más de ocho años inició su construcción, ha este edificio viejo le debemos mucho, nos enseñó mucho a trabajar sin nada, a resolver los problemas con lo poco que teníamos y por eso le doy las gracias”, agregó.
(Foto y video: Luis Soto)