Abigail Becerra/SIPSE

CANCÚN, Q. Roo.- El 75% de los casos atendidos no tienen que ver con un problema clínico o psicológico, sino de estructura familiar.

 

Adicción al alcohol, violencia intrafamiliar, abuso sexual y crisis suicidas fueron las principales causas de atención proporcionadas a 120 personas y 65 familias en el Centro de Atención Familiar (CAF), dijo Sergio Anaya Andreu, director general de centro, especialista en psicología y educación y desarrollo humano.

 

Señaló que el 25% de la atención restante, refieren un trastorno clínico que tienen que ver con falta de límites, disciplina y atención, como factores principales en la disfuncionalidad familiar y detonante en la conducta de los hijos a nivel cognitivo y emocional.

 

Informó que Cancún es un ambiente muy complicado para la dinámica familiar y matrimonial, ya que el fenómeno de divorcios es más alto que la media nacional, por lo tanto los hogares en términos de familia (padre, madre, hijos) no es común.

 

Mencionó que en su experiencia los hijos están a cargo de otros familiares, en el mejor de los casos, y no elementos óptimos para el desarrollo de los menores, por lo que el CAF brinda herramientas de adaptación para ellos y sus padres, para que de forma interna las familias puedan reparar heridas, conflictos emocionales, baja autoestima, poco sentido de valía e identidad, entre otros.

 

Además de hacer frente a los agentes externos, como aprender a ser esposo, esposa o padres, ya que en muchos de los casos no hay preparación para enfrentar los embates del matrimonio y la familia, apuntó.

 

El especialista en educación y desarrollo humano indicó que la misión y visión del CAF es cimentar la estructura matrimonial para generar bienestar en la estructura familiar y los hijos, ya que ninguna pareja sabe logísticamente el rol a desempeñar en casa, provocando finalmente la separación por incompatibilidad.

 

Dijo que primeramente la pareja debe reconocer los elementos internos de carencia, para no proyectarlos en el cónyuge y generar una relación destructiva que desencadene un círculo vicioso y contamine a toda la familia.

 

Detalló que poco son los matrimonios, que sin una relación sana y armoniosa, perduran en esta ciudad.