Anuncian freno a las descargas residuales en la laguna de Bacalar

La Comisión Nacional del Agua (Conagua) se hará cargo de la protección del espacio acuífero; ya iniciaron los trabajos de tratamiento potabilizador.

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Salvador Arizmendi, delegado de la Conagua. (Francisco Sansores/SIPSE)
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Ernesto Neveu/SIPSE
BACALAR, Q. Roo.- La laguna de Bacalar quedó bajo jurisdicción de la Comisión Nacional del Agua (Conagua), luego de permanecer aislada de cualquier ordenamiento debido a que no se definía si pertenecía a aguas interiores, competencia del estado, o a exteriores, de la federación. 
 
Después de varios años de trabajo, y una inversión estimada en dos millones de pesos para realizar el levantamiento topográfico correspondiente, la ciudad de Bacalar inició el proceso de ordenamiento urbano con el control de descargas de aguas residuales que se realizaban directamente al subsuelo y a la laguna, y que ahora son sometidas a tratamiento en una planta potabilizadora.
 
El delegado del organismo, Salvador Arizmendi Guadarrama, precisó que la ciudad ya cuenta con una primera línea de conducción de aguas negras en la parte baja, donde se encuentran las residencias a orillas de la laguna, y ahora se trabaja en el proceso de conexión de éstas a la incipiente red sanitaria.
 
“Nosotros, el gobierno del estado y la CAPA estamos trabajando en la conexión de esta gente; evidentemente nos falta la parte alta y hay que buscar la manera de integrarlos. Pero es el comienzo y vamos a continuar en ello”, indicó.
 
Otra actividad que Arizmendi Guadarrama consideró de suma importancia, es que ya están trabajando en la delimitación de la zona federal, con un avance de 15 kilómetros, lo que dará mayor certeza jurídica a los propietarios de predios en todo el margen de la laguna de Bacalar.
 
“Estamos esperando que se publique el decreto federal, y esto le va a dar certeza jurídica a todos los posesionarios de predios en la orilla de la laguna. Hubo una inversión importante en levantamiento topográfico, planos satelitales y trabajamos en conjunto con el municipio de Bacalar”, agregó.
 
Salvador Arizmendi Guadarrama afirmó que los propios posesionarios de predios en la zona que los bacalarenses bautizaron como “La costera” presentaron hasta 200 solicitudes de atención, pero no había sido posible atenderlas porque no había una delimitación de zona federal.
 
Esta labor significa que ya comenzó la reglamentación y control de las descargas de aguas residuales, el manejo de estas a través de una red sanitaria y la delimitación de la zona federal, tarea que todavía se llevará algún tiempo más.
 
Sin embargo, dijo que implica un gran esfuerzo de las autoridades de los tres órdenes de gobierno, que continuarán asignando recursos para concretar el proyecto.  
 
(Edición: Rafael Pérez)

 

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