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CANCÚN, Q. Roo.- Si estás por ser evaluado en alguna disciplina o quieres aprender un idioma pero la concentración te juega en contra, tal vez sea mejor intentar aprender mientras duermes.

Científicos han hecho varios estudios en los que comprueban que hay algunas cosas que podemos aprender mientras estamos durmiendo, la mayoría de ellas dependen del sonido, informa el portal web swagger.mx.

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Esto es lo que puedes aprender mientras te “echas una pestañita”:

Otro idioma

The Oxford Journals dio a conocer un estudio en el que investigadores pusieron en altavoces grabaciones de algunas palabras básicas de otro idioma a los participantes mientras dormían. Además, había otro grupo de personas que no fueron expuestas a ningún sonido.

Como resultado, el grupo que había escuchado la grabación fue capaz de identificar y traducir con más facilidad las palabras que habían escuchado durante la noche, a diferencia de aquellos que no fueron expuestos a ningún sonido.

Reactivación de la memoria

Un estudio de la Universidad de Basilea, en Suiza, comprobó que recordar mientras dormimos es mucho más efectivo que hacerlo mientras estamos despiertos.

Según el investigador Björn Rasch, reactivar un recuerdo mientras dormimos podría fijarlo mejor en nuestra memoria. Para comprobar esto, entrenaron a los participantes en "memoria espacial". Estos aprendieron a relacionar un olor con la localización de un objeto en una cuadrícula, de forma que al sentir el olor recordarían inmediatamente dónde se encontraba el objeto.

Una vez fijado el nexo olor-objeto, esta reactivación del recuerdo se practicó en algunos participantes mientras dormían, liberando en ese momento el olor en cuestión, y en otros, haciéndolo mientras se encontraban despiertos. Así, descubrieron que los sujetos a los que se les había reactivado así la memoria durante el sueño recordaban luego con más precisión la localización del objeto.

Música

En un estudio publicado en la revista Nature Neuroscience, investigadores enseñaron a los participantes a tocar melodías de guitarra, luego practicaron durante 25 minutos y después les pidieron que tomaran una siesta de 90 minutos.

Sorprendentemente, el grupo había memorizado mejor la melodía mientras dormía en comparación a aquellos que no durmieron. Los investigadores creen que esto sucede porque cuando dormimos, el cerebro hace como un “recuento” de lo que vivimos durante el día.

Así, si tomamos una siesta luego de practicar alguna habilidad, nuestro cerebro practicará lo aprendido minutos antes.

Sueño pobre

Sin embargo antes de intentar estas técnicas debes cerciorarte de no pertenecer a los cinco de cada 10 quintanarroenses que tienen un sueño pobre e insuficiente.

Rafael Maciel Morfin, neurocirujano del Hospital Galenia, comentó en entrevista pasada que a pesar de que las personas duerman sus cinco horas, el sueño no es reparador debido al estrés y a problemas mecánicos ajenos a los neurológicos.

Explicó que los problemas del sueño pueden ser causados también por el sobrepeso, debido a que la caja del tórax disminuye su función durante la respiración. El estrés y la rutina cotidiana son detonantes para que no se logre un sueño profundo.