Paloma Wong/SIPSE
CHETUMAL, Q. Roo.- Othón P. Blanco hay más de 30 mil perros callejeros, denominados así por no estar encerrados en las viviendas, que provocan el crecimiento de la fauna, además de problemas sociales y enfermedades como la rickettsiosis.

Los canes callejeros se han convertido en un dolor de cabeza de las autoridades municipales, principalmente al momento de capturarlos porque terminan saliendo sus respectivos dueños.

Karla Bustillo Sierra, regidora municipal, dijo que la última estadística proporcionada por la Dirección de Desarrollo Social habla de la existencia de 30 mil perros callejeros, cifra que puede tener un incremento.

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“Estos son los que hay en las calles, lo que vemos es que muchos de ellos tienen dueño, pero los dejan en la calle, entonces es lo que provoca el problema”, comentó.

Para disminuir la incidencia de fauna callejeros, explicó que es necesario aplicar la esterilización, ya que con un animal esterilizado, se puede evitar el nacimiento de mil 500 mascotas de un ciclo de reproducción proyectada a tres o cuatro años.

Llamado a los dueños 

Bustillo Sierra hizo un llamado a los dueños de los canes a ser responsables, porque la afectación no sólo es para ellos, sino que también para las familias que viven a los alrededores de donde han sido encontradas jaurías.

Por su parte, José Pérez Ramírez, coordinador de Salud Municipal en Othón P. Blanco, indicó que cuando los perros ingresan al Centro de Atención Canino son desparasitados y les brindan el tratamiento para evitar que tengan garrapatas.

“Al día llegan de cinco a 10 quejas ciudadanas a través del número de atención 072. Donde los inspectores acuden a verificar, en caso de ser verídico los canes son levantados y llevados al Centro para su atención, en espera de que el dueño vaya por ellos”, puntualizó.

Pérez Ramírez omitió dar una cifra de cuántos perros callejeros ingresan al Centro y cuántos son rescatados por sus dueños. Sin embargo, hay un periodo de 30 días para que pasen por ellos y, al concluir este tiempo son dados en adopción o sacrificados.