Buscan protocolo para proteger a menores víctimas de maltrato

Esto para acabar con las limitantes que las autoridades tienen al momento de acudir a rescatar a un infante que presenta esta situación.

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Aseguran que los familiares, son los primeros en oponerse a que las autoridades intervengan para rescatar a un menor. (Archivo/SIPSE)
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Claudia Martín/SIPSE
CHETUMAL, Q. Roo.- Ante la limitante que tiene las autoridades para poder rescatar a los menores que sufren de maltrato o violencia intrafamiliar, las autoridades buscarán un protocolo de acción para poder rescatarlos.

De acuerdo con la coordinadora de la Unidad de Atención a Víctimas de Violencia de la Policía Municipal en Othón P. Blanco, Alondra Padilla Gorocica, una de las limitantes más comunes es el acceso a los domicilios para rescatar a los menores.

Precisó que trabajan en la búsqueda de los mecanismos ideales y legales que permitan seguir trabajando y atendiendo al sector más desprotegido.

“Los familiares, son los primeros en oponerse a que nosotros podamos intervenir para rescatar a un menor, cuyo rango de edad es de cero a cinco años, aún cuando hay agresiones a los menores, o cuándo ambos padres están alcoholizados arriesgando a sus hijos. Otra restricción es el famoso allanamiento de morada, incluso, cuándo se trate de un rescate de menor. No poder actuar por estar impedidos para ingresar al domicilio”, explicó. 

De manera previa, dijo que ya se han tenido reuniones con personal del número de emergencias 066, con el director de la Policía Judicial del Estado (PJE), con la procuradora de la Defensa del Menor y la Familia, del Sistema para el Desarrollo Integral de la Familia (DIF), Quintana Roo para establecer un protocolo de intervención en conjunto.

“Los menores son los que corren riesgo, no puede ser que estemos viendo el peligro eminente y que no podamos ingresar a un domicilio. Por ejemplo, hemos tenido casos donde los menores son abandonados por una lapso de cinco a seis horas, porque sus padres están trabajando y nos reportan que el menor está llorando, tiene hambre y nosotros sin poder actuar porque no podemos ingresar al domicilio y ponerlo a disposición”, dijó. 

Mencionó que los casos más comunes de violencia que se presentan en el municipio capitalino son relacionados con menores de edad, aunque no pudo precisar el número de casos.

En 2013, la unidad atendió un promedio de 400 víctimas, aunque ello implica enfrentarse a ciertas restricciones.

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