Lanzada al canal de aguas negras la inversión de más de 100 millones de pesos utilizada en la remodelación del centro de Chetumal, el municipio capitalino mantiene en el olvido el proyecto original para reactivar la zona comercial de la Avenida de los Héroes que contemplaba no sólo una cirugía a la infraestructura, sino también un cambio radical en el concepto y en la oferta de productos y servicios.

Porque el planteamiento original que se vendió para sacar a la Héroes de terapia intensiva no tiene nada que ver con el resultado deprimente, a pesar de que invirtieron años de esfuerzo coordinado entre dependencias estatales, municipales y empresariales.

Pero el proyecto, que pretendía entre otras cosas erradicar el ambulantaje de la calle principal, regular a los comercios tanto en su aspecto físico como en la diversificación de productos ofrecidos y convertir el área en una zona amigable para los peatones, quedó enterrado por los malsanos intereses de funcionarios municipales, más preocupadas por sus “negocios” en lo inmediato.

La chambonada en la avenida de los Héroes se suma a una larga lista de trabajos hechos con las patas por el gobierno del estado y empresarios cómplices. Y el platillo servido en nuestra principal avenida comercial no fue de la alta cocina, sino un potaje con Salmonella que envió al hospital a decenas de comerciantes chetumaleños.

El ex alcalde Eduardo Espinosa Abuxapqui, quien recibió la recién remodelada avenida, decidió mantener el imperio del ambulantaje en el centro de la ciudad argumentando razones sociales y políticas, aunque el trasfondo fue más bien económico y sin beneficiar las arcas.

Porque los vendedores ambulantes de la Héroes son un gran negocio para el municipio que les vende a precio de oro el derecho de piso en las esquinas o banquetas del centro de la ciudad, además de que mensualmente sus elementos de Fiscalización generan cientos de miles de pesos en “cuotas”. Un espacio en una esquina se cotiza entre 50 a 70 mil pesos como pago de entrada, más el pago de derechos mensual. Estos arreglos secretos los sigue manteniendo el gobierno de Luis Torres Llanes.

Y mientras los vendedores ambulantes se multiplican, los comercios establecidos pagan las consecuencias al no poder competir en igualdad de condiciones. Esa fue la razón primaria por la que las cámaras empresariales exigieron que en el proyecto integral de reactivación se contemplara la reubicación de los ambulantes, aunque dicha propuesta quedó en letra muerta.