Alejandra Carrión/ SIPSE
CHETUMAL, Q. Roo.- La capital del estado, produce 320 toneladas de basura el día, del cual 40% son productos de papel que equivale a 512 mil pesos, si se comercializa, pero terminan en el basurero.

Kevín García Muñoz, presidente de la Fundación Transforma Tu Entorno, iniciaron el pasado 22 enero con un programa sustentable de acopio de papel y cartón que venderán a la empresa Biopappel y con el recurso obtenido pretenden mejorar la infraestructura de 66 escuelas de las comunidades rurales  de la zona sur de la entidad.

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“Nosotros queremos aprovechar ese dinero para implementar programas sociales, ya sean alimenticios o educación para el beneficio de la comunidad y aprovechar de esta forma la basura que se genera todos los días”, dijo.

Comentó que actualmente tienen un convenio con diversos restaurantes y dependencias de gobierno para ir recaudando papel y cartón.

Indicó que el apoyo a las escuelas de las comunidades rurales es porque no les llega el recurso de aparte de las autoridades al no cumplir con el mínimo de alumnos.

“La prioridad son las escuelas de las zonas rurales, porque tienen techos en mal estado o no tienen baños, ni computadoras, escritorios, es decir estudian en condiciones precarias”.

Mencionó que solo en Chetumal, pueden recaudar en papel y cartón 15 millones de pesos mensuales.

Datos de la organización

Resaltó que la finalidad de venderlos directamente a Biopappel, es que ellos le entregan cuatro pesos por kilógramo de papel o cartón, mientras que si lo venden directamente aquí en Chetumal, solo les entregan un peso por cada kilo.

De acuerdo con datos de la organización,  una persona tira diariamente un kilo de basura al día de los cuales 500 gramos son productos de papel.

En Chetumal, de las 320 toneladas de basura, 128 son productos de papel con un valor de 512 mil pesos diarios, que al mes son un millón 536 mil pesos y anuales se convierten en 190 millones de pesos.

Según datos de la empresa, en 1961, cada persona consumía unos 21 kilógramos de papel al año, mientras que en la primera década del siglo 21 el consumo per cápita supera los 54 kilos.