Amaury Rodríguez/SIPSE
CANCÚN, Q. Roo.- “Cuando una mujer va a denunciar una violación al antiguo ministerio público (ahora Unidad de Control del Detenido) lo que pasa es muy sencillo, se presenta una actitud de la autoridad que hace que la víctima abdique (desistir) porque tiene que ser examinada para saber si existió realmente una violación”, expresó Adolfo Gómez Vives, abogado de la UNAM.

Los sentimientos de culpa y la vergüenza son los principales factores por los cuales las denuncias no son efectuadas por las víctimas ya que es poco probable constatar el delito ante las autoridades, que son las que determinan si en verdad hubo violación o no, dijo.

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El Diagnóstico de Violencia Sexual realizado por la Comisión Especializada de Atención a Víctimas (CEAV) relevó que del 2010 a 2015 fueron alrededor de tres millones de casos en la República Mexicana y se calcula que aproximadamente, 600 mil casos de delitos sexuales al año podrían no estar registrados.

Las Organizaciones No Gubernamentales (ONG) constatan que recurrentemente los agresores salen impunes a pesar de las denuncias.

“Las víctimas de violaciones presentan estrés postraumático, su vida está en riesgo porque no tiene la estabilidad emocional para hacer frente las situaciones cotidianas y mucho menos para que todavía se burlen y sean menospreciadas ante las autoridades del M.P.”, señaló Karla Barrios Rodríguez, sicoterapeuta y sexóloga.

Semáforo delictivo en Quintana Roo

En todo el país se estima que aproximadamente el 93% de las víctimas prefieren no denunciar las violaciones, que representan casi tres millones de agredidas sexualmente, con respecto a la Encuesta Nacional de Victimización y Percepción sobre Seguridad Pública (Envipe 2015), que lleva a cabo el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi).

El Semáforo Delictivo del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública coloca a Quintana Roo entre la media histórica o tasa nacional por cada 100 mil habitantes, que es el segundo peldaño, es decir el de color amarillo y el estado comparado contra la media histórica que se basa en los últimos tres años en cada delito, aparece el color verde donde la meta es la reducción del 25%.