Lara Alfaro/SIPSE
CANCÚN, Q. Roo.- Una de las claves para poder controlar la administración de insulina en los niños que son diagnosticados con diabetes tipo 1, es la dieta.

Para la nutrióloga de la Asociación Mexicana de Diabetes en Quintana Roo, Aída Pinto, el control es sobre los carbohidratos, por ser la principal fuente de glucosa.

Estos alimentos, dijo, abarcan las frutas, cereales derivados del maíz y trigo, tubérculos como la papa, lácteos y leguminosas, que deben ser consumidos de acuerdo al peso y talla del pequeño.

“Un ejemplo es cuando un niño deben consumir mil 800 calorías al día, de éstas máximo 60% debe ser adquirida por medio de los carbohidratos, 20% proteínas y el resto en lípidos”, dijo.

Al determinar las porciones, los padres ayudan a sus hijos a mantener los niveles de glucosa adecuados y así prevenir el deterioro de diversos órganos.

“La mayoría de los representantes que se acercan a la asociación no saben qué deben y qué no deben comer sus hijos, hay que educarlos para evitar crisis de hipo e hiperglucemia”, indicó.

Gran parte de las personas son diagnosticadas por médicos generales, agregó Pinto, estos lo que hacen es restringirle el consumo de frutas y verduras, lo que no es una orientación adecuada, por ello la importancia de visitar a un especialista en nutrición.

Por su parte, la presidenta del Colegio de Nutriólogos en la entidad, Caribe Revilla, manifestó que ningún alimento debe ser quitado de la dieta diaria, sólo consumirse por medio del sistema de equivalencias mexicano, que fue creado para personas con esta patología.

Con respecto a las frutas, indicó Revilla, hay que tener cuidado de no comerlas pasadas de maduras por lo dulce y saber con qué frecuencia consumirlas.