Itzel Chan/SIPSE
CANCÚN, Q. Roo.- El temor a ser aprehendidos y pasar hasta 20 años en prisión, es uno de los principales motivos por los que pescadores de Puerto Juárez dejaron, desde hace más de 30 años, de capturar las especies de tortugas marinas en playas de Isla Mujeres y Cancún.

Miembros de la cooperativa pesquera Isla Blanca, comentaron que años atrás era común pescar a las tortugas de la especie Carey, Caguama, Blanca y Laúd, con el fin de consumirlas como alimento, aunque hubo una temporada en la que llegaron a exportar carne de estos quelonios a China y Japón.

Existe mayor conciencia ambiental 

Sin embargo, en la actualidad hay mayor conciencia ambiental por parte quienes se dedican a la pesca, y algunos argumentan que esto se ha logrado gracias a la difusión de las consecuencias de cazar a una de estas especies que son protegidas por la Norma Oficial Mexicana (NOM)-059.

De acuerdo con un reporte publicado por el Fondo Mundial para la Naturaleza (WWF, por sus siglas en inglés), en el período de 2008 en México fueron detectados 57 caparazones de tortugas en venta en distintos puntos del país.

Sólo tomaron en cuenta los que fue posible detectar, aunque no descartaron la posibilidad de que el comercio ilegal fuera mucho mayor que los caparazones encontrados.

Se complica la detección del delito a simple vista 

A partir del año 2000 ya fue más difícil detectar este comercio a simple vista, ya que las leyes de protección a las especies marinas fueron más difundidas y, por lo tanto, la ciudadanía conoce que es un delito federal capturarlas, así como obtener los huevos.

Actualmente, en Oaxaca y en el Golfo de California es donde hay mayor amenaza hacia las tortugas marinas, ya que a pesar de las leyes, la población a menudo va en busca de ellas para poder usar su caparazón, su piel y consumir su carne.

Existe en Quintana Roo mayor protección de tortugas 

Mientras tanto, hoy en día Quintana Roo se ubica dentro de los Estados con mayor control, ya que de acuerdo con la Comisión de Áreas Naturales Protegidas (Conanp), hay más de 10 asociaciones dedicadas al cuidado de la tortuga marina.

WWF expone en su informe que el mercado negro continúa como una incógnita en los países costeros, pero todo apunta a que actualmente se reproduce en menor escala que hace más de 20 años.