Claudia Martín/SIPSE
CHETUMAL, Q. Roo.- Pese a que la cobertura forestal promedio a nivel nacional es de 35%, en Quintana Roo es cercana al 80%, aunque esto no representa que el índice de competitividad forestal sea favorable. Incluso el estado más competitivo en el manejo de sus bosques, obtiene apenas una puntuación de 57.5% sobre el escenario ideal, es decir, todos los estados se encuentran lejos de alcanzar el nivel de competitividad deseable en el país.

De acuerdo con un estudio realizado por Reforestamos México y el Instituto Mexicano para la Competitividad (IMCO), “Índice de Competitividad Forestal Estatal” en los últimos 30 años se ha perdido la tercera parte de los bosques y selvas primarios de México, a pesar de que estos son la principal fábrica de agua dulce y que hacen del país uno de los 17 megadiversos del mundo.

Estados con competitividad media

A la mitad de la tabla se encuentran los estados con competitividad media: Baja California, Campeche, Guanajuato, Jalisco, Querétaro, Quintana Roo, San Luis Potosí, Sinaloa y Zacatecas.

Acorde a los criterios de evaluación, en Permanencia de Bosques, entre los principales retos del Estado están la competencia potencial de actividades agropecuarias, así como el peligro de inundaciones y la poca superficie de zonas adecuadas para forestación. Sin embargo, Quintana Roo obtuvo el primer lugar en cuanto al valor de sus servicios ambientales y en terrenos forestales en recuperación.

En Sofisticación de la producción, Quintana Roo es un estado con mayor productividad tanto por empleado como por empresa y con mayor inversión en certificación con mayor precio promedio de la producción no maderable, aunque tiene algunos rezagos como el acceso a infraestructura eléctrica y la falta de estudios forestales.

Aprovechamiento forestal

En cuanto al Potencial de aprovechamiento de los bosques, el Estado destaca por ser el primer lugar nacional en existencias de selvas y bosques,  principalmente compuesto por selvas secundarias y de zonas prioritarias para el desarrollo forestal comunitario, así como por tener el mayor potencial de manejo forestal no maderable.

El proyecto señala que para mejorar la situación competitiva de los bosques el gobierno de Quintana Roo podría emprender diversas acciones, entre ellas transparentar y homologar el presupuesto forestal estatal con los rubros del presupuesto federal, llevar a cabo estudios técnicos y económicos sobre los potenciales de la producción no maderable de sus selvas y compararlo con los potenciales rendimientos de actividades agrícolas a escala; crear protocolos para construir infraestructura en zonas forestales que minimicen su impacto en el entorno.