Paloma Wong/SIPSE
CHETUMAL, Q. Roo.- La depresión geriátrica es una de las enfermedades que sufren los adultos mayores a partir de los 70 años de edad, derivado de la falta de atención u olvido de sus hijos o de familiares cercanos.

El área de la Salud del Adulto y el Anciano de la Jurisdicción Sanitaria Número Uno realiza una serie de encuestas para conocer qué tan grave es la depresión geriátrica entre los adultos mayores, pues no se tiene una cifra exacta de cuántas personas la padecen.

Graciella Ceballos Gómez, responsable del programa de Atención al Envejecimiento de la Jurisdicción Sanitaria Número Uno, explicó que la depresión geriátrica es la etapa que viven las personas al encontrarse solos, pues es un trastorno del estado anímico en el cual los sentimientos de tristeza, pérdida, ira o frustración interfieren con la vida diaria durante semanas o por más tiempo, que de no recibir atención a tiempo les puede causar la muerte.

Algunas de las causas, hacen referencia a los cambios en la vida como son la mudanza del hogar, como por ejemplo a un centro de la tercera edad, la separación de los hijos del hogar, la pérdida de la pareja por fallecimiento o separación, por mencionar algunos.

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Motivación de vivir

Cuando un adulto mayor es detectado con depresión geriátrica es canalizado a la Unidad de Especialidades Médicas del Centro Integral de Salud Mental (Uneme Cisame) para su atención psicológica y motivarlos a seguir su vida y convivir con otras personas.

Ceballos Gómez, dijo que es importante que los adultos mayores, a partir de los 60 años, sean canalizados a un área de convivencia para relacionarse con otras personas de su misma edad, pues a los 80 e incluso a los 90 años aún tienen la vitalidad para seguir con su vida dinámica.  

Cabe hacer mención que el Sistema para el Desarrollo Integral de la Familia (DIF), a través de la Procuraduría de la Defensa del Menor y la Familia, registra alrededor de 10 quejas al mes de personas de la tercera edad en casos de abandono o maltrato.