Lara Alfaro/SIPSE
CANCÚN, Q. Roo.- El pasado sábado por la noche, un grupo de adolescentes salió a divertirse en la feria ubicada en el cruce de las avenidas Kabah con Xcaret, de la supermanzana 21, sin saber que ese compartir entre amigos terminaría de forma trágica.

Todo comenzó cuando el adolescente de 17 años, estudiante del quinto semestre en el Colegio Bachilleres II, se subió al aparato mecánico llamado Turbo Force, antes se despojó de sus zapatos y al dar inicio a la diversión comenzó a llover, al bajarse y colocar sus pies en la lámina de metal fue cuando recibió la descarga eléctrica de 220 voltios y fue expulsado al suelo. Según trabajadores de la feria, el joven fue atendido por un grupo de paramédicos que se encontraban laborando en el lugar, hasta que llegaron los paramédicos de la Cruz Roja y lo trasladaron al Instituto Mexicano de Seguro Social IMSS, ubicado en la avenida Cobá.

El padre del joven informó que el chico se encuentra actualmente en un coma inducido, según el reporte médico la función renal y cardíaca comenzó a normalizarse y se espera que en 72 horas los galenos diagnostiquen si puede salir del coma. “Los médicos le están regulando el ph de la sangre, ya que al momento de electrocutarse su corazón dejó de latir y se alteró, además, una vez que salga del estado en que se encuentra será colocado en una cámara fría para desinflamar su cerebro”.

Mecanismo de seguridad

Al preguntarse ¿qué sucedió realmente?, su progenitor de profesión técnico electromecánico, manifestó que lo más probable es que el aparato no tuviese la puesta a tierra, el cual es un mecanismo de seguridad que forma parte de las instalaciones eléctricas y que consiste en conducir los desvío de corriente a la tierra para evitar  que las personas tengan este tipo de contacto. “Si hubiese tenido este requisito indispensable para el funcionamiento de cualquier aparato, a mi hijo no le hubiese pasado nada. Lo que sucedió es que toda la máquina estaba energizada y recibió la descarga”. 

Multa

Por su parte, el encargado de la feria manifestó que están prestando los servicios necesarios a los familiares para encarar tan lamentable situación. “Tenemos años realizando esta feria en la ciudad y es primera vez que ocurre un accidente, por lo que estaremos pendiente del progreso del paciente”. El director de Protección Civil señaló que el lugar fue clausurado y debe pagar una multa de entre 70 mil a 100 mil pesos, además de ser sometidos a una nueva inspección para ver si cumplen con las normativas indispensables para su funcionamiento.