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Poco habla de los productos y subproductos que en realidad ofrece. (Carlos Horta/ SIPSE)
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E. Neveu/ C. Martín/ SIPSE
CHETUMAL, Q. Roo.- La marca Grand Costa Maya no resultó ser el “paraguas” que cobijara a las enormes riquezas naturales y culturales del centro y sur del estado, y ahora el sector hotelero propone marcas para cada microdestino. 

Georgina Marzuca Fuentes, presidenta de la Asociación de Hoteles del Centro y Sur de Quintana Roo, consideró que la denominación con la que se ha pretendido promover a esta región del estado, poco habla de los productos y subproductos que en realidad ofrece.

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“Estamos hablando de comunidades y de cultura maya viva, estamos hablando de toda la riqueza ancestral en zonas arqueológicas, estamos hablando de las bellezas naturales en playa, en lagunas, en río, en selvas que tienen el Centro y Sur de Quintana Roo y que se ven poco reflejados en este paraguas de Grand Costa Maya”.

El paraguas que requieren las empresas hoteleras para cobijar realmente tales riquezas tiene que ver con marcas para cada microdestino, además de un esfuerzo importante en materia de promoción para que se ejerzan en tiempo y forma y con aval de los empresarios y asociaciones que generan los recursos para este rubro.

Acciones programadas

“En algún momento hicieron un cambio a los decretos de los fideicomisos y dejaron fuera a las asociaciones civiles y a todo el empresariado de la toma de decisiones de los comités técnicos de los fideicomisos. Entonces, se hace lo que se quiere, cuando se quiere, cuando llega el recurso y no hay nadie que pueda decirlo de manera formal porque es muy fácil ocultar la información y que el dinero no llegue cuando debe ser”.

Marzuca Fuentes preciso que el Estado es quien aporta el recurso monetario a través del fideicomiso, en este caso el de Grand Costa Maya, que debe contar con un plan de trabajo y debería recibir mes con mes lo correspondiente a la recaudación del tres por ciento sobre hospedaje para tomar las acciones programadas para el año.

“Simplemente en este año 2016 hay un presupuesto programado de ocho millones 800 mil pesos, de los cuales se ha ejercido un millón 100 mil. Estamos en septiembre y por lo tanto las cosas no se hicieron en tiempo y forma”.

''No se hacen las cosas''

Esto provoca que las cosas encarezcan, pues –a manera de ejemplo– si programas ir a una exposición y pagas con anticipación te cuesta un precio y si pagas a última hora te cuesta el doble, igual que el costo del vuelo, llegado el caso.

“No sé cuáles sean los planes de la nueva administración. Ellos tendrán que evaluar el trabajo de cada uno de los servidores públicos que están a cargo. En el caso específico de Fernando Salazar, en el Fideicomiso Grand Costa Maya, creo que el recurso no le llega y, con esa excusa –llamémoslo así– no se hacen las cosas. Si él tiene que exigir, no sé por qué no lo hace. Posiblemente por temor a perder su trabajo”.

Disposición y voluntad

Por lo pronto, en los acercamientos con el equipo de transición de Carlos Manuel Joaquín González, ha pedido a los empresarios orden, al igual que los empresarios solicitaron lo mismo, por lo que Georgina Marzuca consideró que será necesario sentarse para hacer los señalamientos puntuales.

En concreto, la disposición y voluntad mostrada por el gobierno entrante va en sintonía con lo que los empresarios del sector turístico pretenden y que se circunscribe a tres grandes rubros: desarrollo, infraestructura y promoción turística, pero con oportunidad y transparencia.

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