Benjamín Pat/SIPSE
CHETUMAL, Q. Roo.- Los diputados locales determinaron implementar, a partir de enero próximo, un nuevo cobro en el municipio de Solidaridad y un nuevo impuesto en Benito Juárez, en lo que fue la última sesión del período ordinario.

El primero se trata de 20 pesos por “derecho de saneamiento ambiental”, que pagarán todos los usuarios de habitaciones de hoteles, posadas, hostales y moteles, por noche de ocupación.

El cobro fue incluido en la Ley de Hacienda del municipio de Solidaridad a propuesta de Eduardo Martínez Arcila, diputado del Partido Acción Nacional y presidente de la Gran Comisión del Congreso del Estado.

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La aplicación de ese derecho ya fue considerado en la Ley de Ingresos de Solidaridad para 2017, la cual fue aprobada en la misma sesión, con una recaudación estimada en 132 millones 209 mil 742 pesos con 60 centavos.

El segundo caso se trata del Impuesto sobre adquisición de Bienes Inmuebles en el municipio de Benito Juárez, que se aplicará a compras, celebración de contratos, permuta, transmisiones de propiedad, cesiones de derechos, incluso, la transmisión de propiedad por herencia o legado.

De acuerdo con el dictamen aprobado por unanimidad de los diputados de todas las fracciones parlamentarias, el impuesto se calculará aplicando una tasa del 3% al valor del inmueble.

Las dependencias no pagarán 

El impuesto no se aplicará en las adquisiciones que realicen dependencias, entidades u organismos estatales o municipales para acciones o programas de vivienda.

“En el caso de viviendas de interés social, tendrá un deducible equivalente a 10 días de Salario Mínimo General vigente en el estado elevado al año, mismo que será aplicable a la base para el cálculo del impuesto”, señaló el dictamen.

Dicho impuesto fue una propuesta de Tyara Schleske de Ariño, José Carlos Toledo Medina, José de la Peña Ruiz de Chávez, Ana Patricia Peralta de la Peña y Santy Montemayor Castillo, todos integrantes de la fracción parlamentaria del Partido Verde Ecologista de México. 

Los legisladores se pusieron de acuerdo para aprobar por unanimidad cada uno de los dictámenes, incluso, los del PRI y el PVEM, se retiraron del Congreso y no regresaron, hasta que se confirmó el voto unánime en ambos puntos.