Javier Ortiz/SIPSE
BACALAR, Q. Roo.- La siembra del árbol de ramón podría convertirse en una alternativa redituable en el municipio de Bacalar, que auxiliaría a los productores que se dedican a la siembra tradicional de maíz y frijol en temporada, que los dos últimos años han sufrido el revés del cambio climático, ante las severas inundaciones e intensa sequía que han destruido los cultivos.

Alfonso Ek Poot, habitante de la comunidad de Blanca Flor, consideró que la producción de nuez de ramón sería una alternativa para los habitantes de las comunidades rurales que han sufrido el impacto del mal clima.

Subrayó que en el municipio de Bacalar seis comunidades se dedican a esta actividad, de 18 en el Estado, entre las que se encuentran: Nuevo Jerusalén, Margarita Maza, Iturbide, 18 de Marzo, La Pantera y Melchor Ocampo, las cuales apenas están ingresando con la producción de este árbol.con las hojas secas del ramón se produce forraje para ganado y té verde antes de que se sequen.

Manuel Mendoza Cauich, propietario de la empresa Ramonal Maya, con sede en Mérida, Yucatán, afirmó que tiene 12 años trabajando este producto y actualmente cuenta con 30 mil plantas en el vecino Estado. Indicó que cada planta puede dejar como ganancia al productor alrededor de cuatro mil pesos anuales, pues la cosecha se hace en dos temporadas. Instó a los productores locales a impulsar esta actividad en el municipio de Bacalar, con la seguridad de adquirir su producción, pues tiene mercado suficiente para comercializarlo.

Entre las bondades del cultivo del árbol de ramón, señaló que, además de representar un pulmón natural, ya que no es un recurso maderable, puede representar una alternativa productiva para los productores del municipio de Bacalar, ya que es un producto cada vez más demandado.

El Gobierno de Yucatán, desde hace tres años impulsa los llamados “Huertos Orgánicos de Traspatio”, en los que se integra los frutos de ramón, a fin de convertirlo en un factor importante para la economía familiar, ya que con ella se puede elaborar café, panes, galletas, flanes, tortillas, entre otros productos, los cuales son susceptibles de comercializarse.