Alejandra Flores/SIPSE
CANCÚN, Q. Roo.- “Fin de semana y otros poemas”, es el libro de juglarías, el disco de antología y la promesa cumplida que José Luis “El Juglar” Salgado ofrecerá en breve y con la presencia de quienes en complicidad, se suman gozosos a la fuerza de su voz, a la sabiduría de sus palabras, a la entraña expuesta en carne y tinta viva.

Hecho en Cancún y recién salido del horno, el poemario de El Juglar tiene la esencia de los temas que lo comprenden, política, música, identidad, nostalgia, crítica social. Concluido en mayo pasado, “Fin de semana y otros poemas” tiene también la marca de un editor a la altura, Mauricio Ocampo, quien desde la sociología, lee en la obra de Salgado a la urbe que permea en la prosa poética de un autor que mira desde su propia historia, el rostro vivo de cualquier ciudad.

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“Fin de semana y otros”, poemas es el paso lógico de artista callejero, del teatrero de banqueta, del declamador de parque, de salón de clase, de comunidades obreras y campesinas. Como si todas las palabras aprendidas para hacerlas suyas, finalmente se tradujeran en textos nuevos y vitales.

Y así surgen textos como “Democracia representativa”, “El cuervo”, “Fin de semana “, “Un día cualquiera”, “Migrante”, “Lamento”, “Rebelión”, “La muerte y yo”, “Canción del Juglar”, “Los buitres gandayas”, “Rhythm and blues”, “Jarana a Ixchel”, y “Amor a primera vista”, trece poemas donde es posible descubrir al admirador de la poesía indígena mexicana, de los corridos revolucionarios, del teatro de carpa y “Palillo”, de dramaturgos como Dario Fo y Bertolt Brecht, agradecido de su cuna teatral: Los Mascarones de México, lo mismo que de sus pares: El teatro la Candelaria de Colombia, El teatro experimental de Cali, El teatro Campesino de los Chicanos, Livin Theatre de U.S.A. Tadeus Kantor.

“Aun no puedo soltar prenda”, nos dice en entrevista, ”ya merito”, promete, y concluye: “estoy más que contento, más que eso porque lo contento es efímero, la satisfacción es duradera”.