Edgardo Rodríguez/SIPSE
CHETUMAL, Q. Roo.-Las últimas lluvias que se dejaron sentir en la zona sur del estado obligaron a suspender la cosecha de la caña de azúcar por algunas horas en la ribera del río Hondo; no obstante, los productores se mostraron optimistas, pues la molienda continúo sus trabajos con la materia prima cosechada durante el jueves y miércoles y, además, la precipitación beneficiará al desarrollo del cultivo.

Gabriel Rivas Canul, presidente de la Asociación de Productores Cañeros A.C., detalló que el corte de la vara dulce se retrasó, dado que las brigadas de labriegos no pudieron ingresar a las parcelas a consecuencia de las condiciones climáticas, pues los predios se encontraban con lodo.

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Ante esta situación, dijo que ayer no lograron cumplir con la cuota diaria de nueve mil toneladas diarias en el ingenio San Rafael de Pucté, aunque las labores no se detuvieron como en otras ocasiones, pues tenían caña en espera de ser entregada, aunque, al estar a la intemperie, las precipitaciones pudieran disminuir el nivel de azúcar contenido en ella.

David Escobar Fabián, productor del ejido Álvaro Obregón, aseguró que estas lluvias representan un beneficio para los cañicultores, ya que la caña de crecimiento temprano-medio y tardío obtendrán mayor humedad que la planta de desarrollo temprano, la que fue la más afectada durante la sequía del año pasado. 

Añadió que actualmente en Quintana Roo se cultivan 31 mil hectáreas de caña, con una molienda de 373 toneladas.